LOS MANDAMASES DEL FÚTBOL

Una vez hablé sobre entrenadores que por su idiosincrasia, sapiencia futbolística, marcada personalidad o estupidez supina han pasado a los anales del fútbol. Pues bien, me parece oportuno hacer también mención a esos avezados hombres de negocios que en un momento de su vida decidieron trasladar todos sus magnos conocimientos y su pasión por aprender y por lucrarse a nuestro querido deporte de la pelotita; esos seres de intelecto superior que en lugar de actuar como el resto de mortales y quejarse por la bochornosa actuación de su equipo mientras leen el "Marca", tienen la suficiente gallardía para dar un paso al frente, hurgarse el bolsillo y comprarse el mismísimo equipo para ellos solitos cual si tablero de Subbuteo se tratara. Hablamos, como no, del selecto club de los PRESIDENTES DE CLÚ(b).

Por no extenderme mucho, haré como siempre y limitaré mi análisis a 4 figuras, aunque me quedo con ganas de mentar a muchos otros. Quizás haya tiempo más adelante.

JESÚS GIL Y GIL, CUANDO LOS FACINEROSOS DOMINABAN LA TIERRA

Que tipo de lista de pacotilla sería ésta si no estuviese encabezada por don Jesús. Este ejemplo hispano de hombre hecho a sí mismo ya era un nombre conocido mucho antes de meter sus rechonchas manos en el panorama futbolístico. Allá por los años sesenta fue acusado de homicidio al derrumbarse uno de los apartamentos que su constructora había hecho en Los Ángeles de San Rafael, muriendo 58 personas. Si a este número de fallecidos le sumamos otras tantos entrenadores con graves secuelas físicas y psíquicas, podríamos decir que la férrea mano de Jesús Gil causó más terror que las sangrientas purgas estalinistas del comunismo. No obstante, al igual que si se tratase de un bravo morlaco, Gil acabó recibienco el indulto de manos de Franco (no sin antes haber recibido una jugosa cantidad de dinero, claro).

En 1987 llegó a la presidencia del Atlético después de una campaña en la que golpeó contra todo y contra todos. Empezó avisando de que en su equipo solo quería ganadores, e iba a buscar cuanto antes a los que no tuvieran ese carácter porque le sobraban, y la verdad es que esas palabras sonaban un poco a Fidel Castro cuando empezó a echar de Cuba a todos los quinquis para que se fueran a Florida. Nada más llegar al Calderón se encontró con otro hombre al que también le iba mucho la marcha, el zapatones de Hortaleza, recordando ambos a una de esas parejas de ancianos cascarrabias de "Escenas de matrimonio", pero en versión futbolística y mucho más hardcore (ya en el primer día de mandato de Gil, Aragonés le agarró del cuello de la camisa a éste ya que le había tenido mucho tiempo esperando antes de una reunión). Nuestro querido Kingpin pasó por los juzgados más veces que un cistítico por el retrete, llegando a tener más de 80 casos abiertos simultáneamente, haciendo gala de una contabilidad muy imaginativa: "si yo soy el alcalde de Marbella, pongo publicidad de "Marbella" en las camisetas de mi equipo y pago a mi equipo con dinero público por llevar esa publicidad, me forro y mato dos pájaros de un tiro". Eso es un gran empresario y no Solbes...

Tras varios años de proyectos fallidos, entrenadores con crisis nerviosas y con varias ordenes de alejamiento interpuestas por muchos jugadores, por fin en 1996 el tío Gilito consiguió la tan ansiada Liga y la célebro por todo lo alto, paseándose junto a la fuente de Neptuno subido en una carroza tirada por seis corceles, asemejándose así a uno de esos dictadores de república bananera. Los años siguientes no fueron demasiado felices para el soriano ya que el cerco policial se había estrechado en torno a él, hasta que la tensión (tanto la arterial como la emocional) acabaron definitivamente con él. No obstante, reconocidas fuentes como Friker Jiménez tienen la creencia de que Gil no ha muerto sino que vive de incógnito junto con Elvis en una paradisíaca isla alejada de la mano de Dios.

Como siempre, acabemos recordando algunos de sus más celebres frases:
_"Digo lo que me da la gana, y el que no esté de acuerdo que se vaya a tomar por culo"
_"Mi error ha sido tratar a los jugadores como personas"
_"En el partido de ayer Andújar Oliver parecía un niño de cinco años con un revólver en las manos"
_"If you are black and I say black, black, black all day, is very bad"
_"No ficharía a Klinsmann porque pierde aceite"
_"Al negro le corto el cuello. Me cago en la puta madre que parió al negro" (refiriéndose al Tren Valencia, claro)



RAMÓN MENDOZA, EL CLINT EASTWOOD DE LA CASA BLANCA

Este madrileño de pelo cano murió a los 74 años en las Bahamas junto a una preciosa mulata. Creo que con esto ya nos podemos hacer una idea del carácter de este ex-presidente del Real Madrid, un tío que le sacó jugo a la vida hasta el último instante. Mendoza podría ser perfectamente el arquetipo de chulo madrileño que nos podemos encontrar en una zarzuela, pero en lugar de eso decidió abandonar su puesto como gestor del Hipódromo madrileño para dedicarse al fútbol. En aquellos tiempos en los que la diplomacia y el guardar las formas eran confundidos fácilmente con la mariconería, don Ramón fue un hombre muy cercano a los amigables Ultras Sur, e incluso compartía alegrías y fiestas con ellos (todavía tengo grabada en la cabeza la imagen de Mendoza dando saltos con los Ultras Sur al grito de "Bote, bote, bote, polaco el que no bote".

Si decíamos antes que Mendoza encontró su muerte en las paradisíacas playas de Bahamas, fue en otras islas no tan "Afortunadas" donde vivió dos de sus peores momentos. El mandamás blanco sufrió el día de la marmota dos años consecutivos en Tenerife, viendo como su equipo caía en la última jornada y perdía la liga contra el Barcelona.

Mendoza pasará a la historia sobre todo por ser el padre (simbólico, por supuesto) de la "Quinta del Buitre", y en el lado negativo por no haber sido capaz de devolver al Real Madrid la tan ansiada Copa de Europa. Debido a chanchullos y tejemanejes varios, en sus últimos años de mandato su presidencia se puso en entredicho y se encontró con varios candidatos ansiosos por quitarle la poltrona, entre los que se encontraba un jóven y entusiasta Florentino Pérez, o como Ramón Mendoza le llamaba: "el cenizo".

En las elecciones a la Casa Blanca de 1995 ambos contendientes sostuvieron una dura pugna, aunque Ramón Mendoza consiguió movilizar incluso el voto de ultratumba, ya que fue acusado por Florentino de presentar avales pertenecientes a socios fallecidos. Esto no fue lo más hilarante de los comicios, ya que en la asamblea de socios en la que Ramón Mendoza dimitió, afirmó que "a partir de ahora vuelvo a ser el socio número 772". A lo que un presente replicó que ese número era el del carnet de su padre. Vivir para ver.



JOAN GASPART, DE FOROFO A PRESIDENTE

Podríamos haber hablado aquí también de Josep Lluís Nuñez, ese pequeño gran hombre que devolvió al Barcelona a los primeros lugares del fútbol mundial, pero será mucho más interesante recordar al hombre en la sombra en aquellos años, que no es otro que el vicepresidente Joan Gaspart.

A este espigado catalán conocido entre sus compañeros como "el tortillas" -debido a su profesión de hostelero y restaurador- nunca se le han caído los anillos por proclamar su forofismo, ya que es, al igual que Ramón Mendoza, un amiguete más de los seguidores radicales de su equipo. Debido a ello es también uno de los hombres más odiados por los hinchas de los equipos rivales e incluso de su propia afición, a la que desquició durante sus tres años de mandato. Un tipo excéntrico este Gaspart, sin duda alguna, y prueba de ello son los fichajes de Rochemback, Dehú, Alfonso o Christanval. Un hombre con semejante balance no puede estar en su sano juicio.

Quizás ese baño que se pegó en gayumbos en el gélido Támesis tras conseguir el Barcelona la Copa de Europa en Wembley le trastocara su raciocinio, aunque dicen sus más allegados que el bueno de Joan siempre fue así. Todo un maestro en el arte de las negociaciones, Gaspart tiene el honor de haber puesto al borde de la locura a un montón de representantes y directivos cuando éstos han tenido la desdicha de afrontar una reunión de negocios con el catalán. En una sesión con los delegados del Betis en los que se trataba el traspaso de Ángel Cuellar al Barcelona, Gaspart les anunció que el trato se cerraría en menos de una hora. Pues bien, la reunión comenzó a las doce del mediodía y ya había pasado la medianoche cuando los directivos del Betis salieron de las oficinas barcelonesas visiblemente cabreados y mascullando que "el Gaspart ese no vuelve a reírse de nosotros". No obstante, Cuellar acabó en el Betis. Para conseguir su objetivo, Gaspart no dudaba en utilizar todas sus artes para desorientar al enemigo. Nada más obtener la presidencia, debía resolver cuanto antes la renovación de Rivaldo. Como le estaban reformando el despacho, Gaspart hizo sentarse al brasileño en el suelo y sin contratos de por medio acordaron la renovación por una auténtica millonada. Para dejar claro que Rivaldo no se iría del Barcelona, Gspart no dudo en decírselo a la prensa incluso en chino.

Famosa es la imagen de Gaspart huyendo del palco en los últimos minutos de los partidos para ver el final por alguna televisión, ya que los nervios no le permitían mantener las formas. Buena fé de ello puede dar el ex presidente valencianista Pedro Cortés, que vivió en primera persona como Gaspart se desgañitaba tras conseguir Rivaldo en el último minuto el gol que les clasificaba para la Champions. Otro de los éxitos de Gaspart fue el de masificar estúpidamente la clase directiva, ya que durante su presidencia había simultáneamente unos cuarenta vicepresidentes más o menos.

El ahora presidente del histórico Sant Andreu tiene en su haber varias frases históricas fruto de su incontinencia verbal:

_"Mi madre y la de Luis Enrique son las más populares en el Bernabéu"
_"Nadie me tiene que decir que somos el mejor club del mundo. Ya lo digo yo".
_"Es indignante. Nos han atracado y nos vamos como si nos hubiesen robado la cartera" (tras un partido en el Bernabéu).
_"La bandera española es la de mi Estado, al que yo quiero muchísimo. Tengo muy claro cuál es mi selección. No quiero otro pasaporte que no sea el español. Sé cuál es mi Rey, mi primer ministro, aunque éste sea un aficionado del Real Madrid".



FRANCISCO ROIG, EL MURCIÉLAGO DE MESTALLA

Como ya sabemos sobradamente, la poltrona de los clubs de fútbol no suele estar ocupada por élites intelectuales, ni mucho menos. Durante los gloriosos años 90 vivimos esa etapa en la que los clubes pasaron a ser sociedades anónimas, momento que aprovecharon los más listos -que no los más inteligentes- para dar el pelotazo y asegurarse más dinero en el bolsillo a través del balompié. Francisco Roig, promotor inmobiliario de profesión, fue durante su mandato el perfecto antagonista de Jesús Gil; ambos tenían una bondad infinita y un carácter templado y dialogante, amantes de la razón y profundos detractores de la violencia tanto física como verbal, marcaron un antes y un después en el devenir de sus clubes.

Por si no habéis entendido la ironía en lo dicho anteriormente, os diré que Roig fue capaz un día de liarse a hostias con su jugador Lubo Penev, acabando ambos en comisaria con moratones y heridas varias. Hay que ser un tío con un par de huevos (Penev sólo tenía uno desde su cáncer testicular) para hostiarse con un búlgaro de 1'90 y no morir en el intento. Ya veis que Paco Roig no era precisamente un angelito, y es que el haber ayudado desde pequeño en la carnicería de su padre sin duda fue un hecho que marcó su carácter para siempre; ya se sabe que uno no puede escapar de sus orígenes, por muy agrestes o rústicos que éstos sean.

En otra ocasión Paco Roig fue tambié agredido por los Ultra Sur por motivos desconocidos, aunque es difícil saber que cojones hacía este hombre en un Real Madrid-Espanyol

Roig prometía año tras año un "Valencia triomfant", aunque a la hora de la verdad lo único que triunfaba eran sus chanchullos fútbolísticos y pelotazos inmobiliarios que harían sonrojar al mismísimo Jesús Gil. Tal es así que en una de sus visitas al palco del Vicente Calderón Paco Roig acabó con un ojo morado, al parecer debido a un hincha furioso (aunque no descartamos que fuera un enviado de don Jesús). Para su desgracia, los éxitos deportivos no llegaron a las orillas del Turia hasta la salida de Paco Roig, algo que seguramente es pura casualidad ya que con fichajes como los de Aristizábal, Parreira, Engonga o el Romario más fiestero que recuerdan los locales nocturnos valencianos se hace difícil de entender que no cuajaran los planes de Roig de dominar el mundo. La sombra de la corrupción siempre planeó sobre la cabeza de Roig (ésta es la justicia que hay en España, siempre acosando a honrados hombres de negocios como Roig, el mismo Gil o don Manué Ruiz de Lopera), aunque eso no fue óbice para que consiguiera una ampliación de capital en el Valencia para forrarse y de que hace unos años volviera a la primera plana del club proclamando su amor por el Valencia, pero tras recibir una suculenta oferta por su paquete accionarial ese amor desapareció súbitamente.

Una familia dedicada al deporte la de los Roig, ya que su hermano Fernando es presidente del Villarreal y su otro hermano Juan lo fue del Pamesa Valencia. Aquí tenéis unas cuantas verdades de este hombre duro, pero duro de verdad:

_"Cortés nunca va de frente, le gustan las cosas por detrás"
_"Tenemos varios internacionales en los menos veinte" (¿querrá decir en los sub-21?)
_"Tenim un equip campió"
_"Quiero presentar al nuevo mister del Valencia, el señor Rinaldi" (en la presentación de Ranieri)

2 Responses

  1. Melo Says:

    Ramon Mendoza se fumaba un cigarro cada dos minutos,....y dos minutos despues otro.(Yakito)--Sin comentarios...