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PARTIDAZOS: BARCELONA-GOTEBÖRG 1986

Hace poco tuve la oportunidad de ver el documental "Fotbollens sista proletärer", que hace un repaso por los años mágicos del IFK Gotebörg, legendario equipo sueco que durante los años 80 paseó sus fútbol rocoso y eficaz por los campos de Europa con gran reconocimiento y éxito. En la película se hace especial memoria de aquella temporada 1985-86 en la que el equipo blanquiazul estuvo a un paso de clasificarse para la final de la Copa de Europa, en una espectacular eliminatoria contra el FC Barcelona.

El narrador del documental dice que "no fue hace tanto tiempo, sin embargo todo es ahora tan diferente". Y es verdad, en aquel año 1986 equipos modestos como el Gotebörg o el Steaua de Bucarest eran capaces de llegar hasta las últimas instancias de la Copa de Europa, el representante español en la máxima competición era un Barcelona que practicaba un estilo de juego muy directo y puramente inglés de la mano de Terry Venables (el "estilo Cruyff" era en aquellos años todavía una quimera), el fútbol era un deporte mucho más duro -es verdad- pero también más honesto y en el que no había concesiones de cara a la galería, todo podía pasar y a la hora de la verdad incluso los más grandes equipos podían sucumbir ante el pez más chico.

Con este panorama se presentó el Barcelona en el modesto estadio Ullevi para dirimir el partido de ida de las semifinales de la Copa de Europa ante el Gotebörg. Para llegar a esta eliminatoria, el equipo catalán había tenido que sudar tinta para eliminar al Sparta de Praga y al Oporto primero, y a la poderosa Juventus de Platini, Scirea y Michael Laudrup después, y por ello los azulgranas contaban con vivir un duelo más tranquilo ante el -a priori- menos inquietante conjunto sueco. Formado por un bombero, un cocinero y un fontanero, entre otros oficios, el Gotebörg tenía un carácter de equipo amateur que no se correspondía con sus prestaciones sobre el terreno de juego, como bien había podido comprobar el Aberdeen de Alex Ferguson en la eliminatoria anterior.

Terry Venables había tomado bueno nota: "Ni el Gotebörg es amateur, ni me fío un pelo de ellos". Las sospechas eran fundadas: antes del descanso, el cocinero Torbjörn Nilsson ya había puesto un inquietante 2-0 en el marcador, y para rematar la faena el bombero Holmgren se encargo de apagar todas las esperanzas del Barcelona con un tercer gol. Importante descalabro, que no podía achacarse totalmente ni a la mala suerte ni al mal estado del terreno de juego. En el vestuario azulgrana las caras eran de pocos amigos y la eliminación se veía esta vez muy cercana, sólamente algunos jugadores de carácter como Julio Alberto o Marcos hacían declaraciones optimistas de cara al futuro, e incluso el lateral apelaba a los "huevos" para poder sacar la eliminatoria adelante con el apoyo del público.


Durante las dos semanas previas al partido de vuelta, el Barcelona no paró de lanzar mensajes a los aficionados para que llenasen el Camp Nou, animasen sin parar al equipo y fuesen una parte activa y desequilibrante de la eliminatoria. Y llegó el día 16 de abril con malas noticias: dos de los pilares del equipo, Steve Archibald y Berndt Schuster serían baja para el crucial choque, aunque a última hora el alemán pudo recuperarse con las facultades físicas muy mermadas. En la punta del ataque, las esperanzas habían sido fiadas a Pichi Alonso, que se había pasado tres años calentando banquillo en el Camp Nou y que en circusntancias normales ni habría pasado vestirse de corto aquel día. Pero como el destino tiene estas cosas, quién menos se esperaba fue el que dinamitó la eliminatoria: en un estadio que se mostró como una olla a presión, el Barcelona salió en tromba desde el principio y a los 10 minutos ya se había adelantado en el marcador gracias a Pichi.

Pero este contratiempo no alteró para nada al equipo sueco, que siguió a lo suyo sin ponerse nervioso. De hecho hubo una parte del partido en la que Uruti fue -como tantas otras veces- el salvador del Barcelona con paradas de mérito. El partido era vibrante, con dos equipos jugando de forma muy concisa y directa, con constantes ocasiones de gol, y así discurrieron las cosas hasta que a falta de 25 minutos para el final, Pichi recibió un pase en profundidad de Migueli y definió con la tranquilidad propia de un cazagoles nato. 2-0 y el partido entraba en esa fase en la que el corazón se imponía a la razón, y aunque los suecos no se daban por vencidos, parecían resignarse al hecho de que el Barcelona no iba a parar hasta cosneguir igualar la eliminatoria. Y así fue, cuando a falta de 25 minutos el Lobo Carrasco relizó una de sus clásicas internadas por la banda izquierda, y tras realizar una serie de quiebros al defensor consiguió zafarse de él para poner un centro perfecto a la cabeza de Pichi, que mandaba el balón al interior de las mallas y ponía en éxtasis al Camp Nou. Tras una tensa prórroga en la que ambos equipos parecieron firmar el armisticio, y en la que Pichi Alonso fue sustituido por Clos, consiguiendo así el aplauso unánime del estadio, se llegó a la fatídica tanda de penaltis.


Y cómo en una tanda de penaltis puede pasar cualquier cosa, pasó que uno de los mejores jugadores durante el partido -el Lobo Carrasco- falló su lanzamiento y acto seguido TorbjÖrn Nilsson acertó en el suyo para poner el 2-4 que obligaba al Barcelona a materializar sus dos lanzamientos restantes y parar el del Göteborg. Calderé consiguió y anotar y el destino del Barça estaba ahora en los guantes de Urruti. El genial guardameta vasco adivinó a la perfección hacia donde iba a lanzar el sueco y detuvo con una estirada felina. El estadio entero estalló en júbilo pero el portero hizo gestos al público de que se calmase, ya que aún había más: el propio Urruti era el encargado de lanzar el último penalti para empatar la tanda.

Y es que Urruti, además de un maestro a la hora de detener penaltis, era también un consumado lanzador de ellos. Sin ningún tipo de nervios, haciendo una paradinha y engañando completamente al portero Wernersson, conseguía el gol de la momentánea tranquilidad. Después de salvar por enésima vez una situación de riesgo extremo, esta vez el partido no se le podía escapar al Barcelona: el noruego Mordt lanzó fuera su lanzamiento y Victor Muñoz ponía el sello a una noche que sería histórica consiguiendo marcar el penalti deinitivo. ¡Éxtasis en el Camp Nou! Pichi Alonso veía sorprendido cómo dos periodistas se disputaban hacerle una entrevista a pie de campo, y les decía en un tono entre jocoso y melancólico "no os peleéis por mi, si nunca me habéis querido", Terry Venables era izado en volandas por sus propios jugadores, Carrasco respiraba por fin aliviado y se quitaba el peso de encima de su lanzamiento fallado, y Victor era abrazado y felicitado por todos, incluido un jóven recogepelotas de Santpedor que vivía desde el anonimato una de sus primeras noches mágicas en el Camp Nou.

25 años después, el Barcelona volvería a jugar una final de Copa de Europa, y lo haría cómo en casa en un Sánchez Pizjuan de claro color azulgrana, ante un rival primerizo llegado de Europa del Este: el Steaua de Bucarest. Pero eso ya es otra historia.

Partidazos: Liverpool - AC Milán 2005

En periodo estival y a falta de fútbol he tenido a bien rememorar el partidazo que nos ofrecieron hace ya seis años el Liverpool y el Milán en la final de la liga de campeones. Para entender mejor todo lo que aconteció en aquel día debemos ponernos en antecedentes porque aunque ha pasado relativamente poco tiempo desde aquel día, han cambiado muchas cosas en el fútbol.

Aunque hoy día el AC Milán no pueda sonar como favorito en las quinielas para llevarse la liga de campeones en 2005 este equipo venía de ganar el Calcio y tenía uno de los mejores equipos del mundo. Empezando por la defensa y acabando por el ataque. Si repasamos la alineación, la verdad es que todos los jugadores de ese Milán eran excelentes.

El Liverpool, otro grande de europa en horas bajas, llegó a la final como sorpresa. Si bien era un buen equipo no había hecho una campaña brillante en Europa. Pasó la fase de grupos en segundo lugar y por gol average, empatando a puntos con el Olimpiacos y sacándole tres goles de diferencia.
Poco a poco fueron avanzando en las eliminatorias y en semifinales dieron el primer aviso serio eliminando al todopoderoso Chelsea de Abrahamovic, un equipo diseñado para ganar la champions que un año más había sido apeado en semifinales.

Con este caldo de cultivo llegó el 25 de mayo de 2005 en Estambul. Dos equipos que habían seguido trayectorias muy diferentes hasta llegar a la final: El Milán había vencido sus eliminatorias con relativa comodidad y un juego muy contundente y el Liverpool que había ido de menos a más. Y aunque sus jugadores no tenían tanto renombre a base de casta y trabajo habían formado un bloque magnífico.

La defensa del Milán era de lo mejor que se ha visto en mucho tiempo.

EL PARTIDO

Y comenzaba el partido. Es una superstición curiosa pero en cualquier deporte cuando hay una copa en juego nadie quiere tocar el trofeo antes de ganarlo. Se dice que da mala suerte y pocas veces se ve a algún valiente que haga el gesto de tocar el premio. En este caso el centrocampista Genaro Gattuso tocó la copa.

Aquello no pareció dar mala suerte porque en el primer minuto de juego Maldini marcó el 1-0 para el AC Milán. Curiosamente y a pesar de su longeva trayectoria creo que es el único gol que marcó en liga de campeones en toda su carrera.
Y por parte del Liverpool si sabes que sobre el papel eres inferior, empezar con un tanto en contra ayuda poco. Aún así la primera parte estuvo igualada, si bien es cierto que siempre dio la sensación el Milán de estar un peldaño por encima.

En un pequeño despiste defensivo Crespo hizo el 2-0 en el 39. Y antes del descanso un magnífico pase de Kaká le dio el 3-0 de nuevo a Crespo en el 44. En cinco minutos el Liverpool había recibido dos mazazos que les había dejado completamente groguis.

Con este panorama terminó la primera parte. Las caras de los jugadores Ingleses eran un poema, entre la desolación y la resignación. Rafa Benitez, el entrenador, permaneció inmóvil mientras veía cómo sus jugadores iban hacia el túnel de vestuarios. Y en ese cuarto de hora de descanso algo mágico debió pasar porque aunque Rafa Benitez siempre ha reconocido que en aquel momento no encontraba las palabras para transmitirles a sus jugadores la pasión suficiente hubo un cambio en la actitud de todos, empezando por la grada:
Cuando toda la hinchada italiana celebraba el resultado poco a poco se fueron apagando. La segunda parte parecía un trámite hasta levantar la copa y es ahí cuando la afición del Liverpool comenzó a cantar su himno al descanso. Era una declaración de intenciones, a pesar de la que les estaba cayendo no iban a dejar que su equipo hiciera el ridículo.
Enlace
Algo extraño había en el ambiente y al comienzo de la segunda parte los ingleses parecían ser más rápidos, estar más atentos y sobre todo jugar mejor.
Así, en el '56 Steven Gerrard marcó el 3-1 en un remate de cabeza en el que marcó perfectamente los tiempos. Su celebración fue levantar los brazos e incitar a la grada a seguir animando.
Dos minutos después Smicer anotó el 3-2 y el Milán se dio cuenta de que esto no había terminado. La gente enloquecía ante el espectáculo que estaba viendo. Los nervios se apoderaban de todo el mundo.

En el '60 Gattuso cometió un penalty sobre Gerrard y todo el estadio enmudeció. Ahí estaba el empate, sólo había que meterla y la responsabilidad recayó sobre el donostiarra Xabi Alonso. Tomó aire, cogió carrerilla y falló el penalty. Afortunadamente cogió el rechace y empató a tres el partido. Lo más difícil estaba hecho y todavía quedaba media hora.

El encuentro estaba igualado, los equipos se habían vuelto mucho más conservadores y estaban más a cara de perro que nunca. Nadie quería arriesgar. Así llegamos al final del partido, aguardaba la prórroga.



En la prórroga se siguió el mismo guión, los dos equipos respetándose muchísimo aunque el Milán estaba mejor y sobre todo daba la sensación de estar más entero. Smicer tenía calambres y los cambios estaban hechos, Cissé había salido para intentar sorprender en alguna carrera larga pero lo cierto es que estaba arriba completamente sólo.

La mejor ocasión de toda la prórroga la tuvo Schevchenko en un remate a bocajarro que Dudek despejó y el rechace a 5,5m de la linea de gol le volvió a caer a Schevchenko que de nuevo falló ante Dudek. Se que es cosa mía, pero cada vez que veo la cara del portero al hacer la doble parada pienso que en aquel momento es cuando de verdad empezó a creer que iban a ser campeones.

Para mi este momento fue clave.

La prórroga había terminado y en una nefasta tanda de penaltis el Milán falló 3 de los 5 lanzamientos. El penalty definitivo lo falló Schevchenko, todo un especialista.


El Liverpool se proclamó así campeón de Europa y veintiún años después volvió a levantar el título.
En 2007 el Milán se tomaría la revancha venciendo en la final al Liverpool, pero eso es otra historia que quizá algún día contemos.

Aquel partido me pareció maravilloso, de hecho es el último gran partido que me ha marcado. Y tú, ¿qué otro partido tienes en la retina que no puedes olvidar?

Matt Le Tissier- Le God

Varias veces hemos hecho mención a la basura en la que se ha convertido el fútbol moderno, lleno de sabandijas, chupacoleópteros y abrazafarolas, como diría el gran José Maria Garcia. Pero gracias a Dios, aún nos queda el recuerdo de aquellos jugadores que nos recuerdan que el fútbol alguna vez fue romántico, y que vestir los colores de tu equipo era más importante que todo el oro del mundo. Jugadores que renunciaron a grandes fortunas, por amasar una más pequeña pero defendiendo los colores del equipo de sus vidas.




Tenemos varios ejemplos de este tipo de jugadores, obviamente como aficionado al Athletic, me viene a la cabeza el nombre de Julen Guerrero, que se mantuvo en nuestro club rechazando cheques en blanco provenientes del Milan, del Madrid y de otros grandes de Europa, o de Francesco Totti que permanece en la Roma desde que inició su carrera.

Hoy, dedicando esta entrada a mi buen amigo Ivane, querría hablaros de otro gran jugador de esa misma época, y no es otro que Matt Le Tissier.






Citando a nuestra vieja amiga wikipedia y a nuetros amigos de Don Balon dejo su historia futbolística:

Matt Le Tissier, nació en Guernsey, una isla situada en el Canal de la Mancha, entre Inglaterra y Francia. Sin duda fue uno jugadores ingleses con más calidad de los últimos veinte años, equiparable a Paul Merson o Paul Gascoigne. Sin embargo, hubo un factor para que Matt no fuera tan reconocido como ellos, su amor a los colores de un equipo, el Southampton FC, más acostumbrado a luchar por evitar el descenso que por optar a cotas más altas
Matt dedicó toda su carrera al club de sus amores, donde coincidió, entre otros, con Shearer antes de su marcha al Blackburn Rovers. Por allí pasaron jugadores que, más tarde o más temprano, terminaban aceptando un contrato para defender a otros clubes de mayor prestigio y objetivos. Él no, él decidió ser fiel a los Saints hasta convertirse en prácticamente un Dios entre los aficionados que, semana a semana, acudían al Victorian former ground (The Dell) donde lo recibían al grito de "he is God, Le God". Vistió la camiseta rojiblanca en algo más de 500 partidos entre liga, Copa y Copa de la Liga, anotando más de 200 goles en quince temporadas (1986-2002).
Sus mejores años fueron, sin duda, desde la temporada 89/90 hasta la 94/95. En esos seis años, Le God anotó la nada despreciable cifra de 96 tantos en liga de entre los que destacó el que le marcó al Blackburn desde casi el círculo central en la temporada 94/95, que fue elegido "Gol de la temporada" por votación popular.
En mayo de 2002, Matthew Le Tissier tuvo su partido homenaje que enfrentaba al Southampton contra Inglaterra en un combinado donde vinieron muchos de sus ex-compañeros, Alan Shearer, Tim Flowers, Paul Gascoigne, Ronnie Ekelund... y como entrenadores Alan Ball, Kevin Keegan, Lawrie McMenemy... La ciudad llenó el estadio con 32.000 aficionados.
Le fue concedido el título de "Freedom of the city" (libertad de la ciudad) por el consejo de Hampshire.
Actualmente trabaja para SKY y ha obtenido la licencia pro de Management por lo que puede ser entrenador en cualquier división.

A lo largo de sus 16 temporadas en el club, Matt Le Tissier recibió suculentas ofertas para cambiar de aires siendo famosas las del Chelsea, Lazio o Atlético. Cualquier otro jugador hubiera caído en la tentación de fichar por un grande y abandonar el "purgatorio" de luchar cada temporada por la permanencia. La idea de lo modesto que era el Southampton es el hecho que según el propio Le Tissier el mejor jugador con el que jugó fue el danés Ronnie Ekelund (ex del Barça B). Pero Matt siempre fue fiel a sus colores y nunca quiso escuchar los cantos de sirena que venían de Londres, Manchester o Liverpool.

Él, como hombre que nació en una isla, siempre supo que los cantos de sirena se escuchaban mejor en Southampton, población costera, y allí se quedó hasta convertirse en la mayor gloria futbolística que el club ha dado en su historia. No obstante, el precio que debió pagar por esa decisión fue alto, hasta el punto que sólo jugó 8 partidos con los pross lo que es uno de los sacrilegios más grandes de la historia del fútbol (el como le ha ido a Inglaterra demuestra el error y la injusticia que cometieron Glenn Hoddle y compañía).






Arte
La concepción de arte en el fútbol se reinventó en las Islas gracias a Le Tissier. Esta afirmación categórica no es para nada exagerada, y prueba de ello es que para muchos ingleses, Matt ha sido el mejor futbolista inglés de los últimos 20 años, si bien tal vez no fue el más completo, sin duda fue el más técnico y el más plástico. Un lujo para los ojos. Un pintor...un artista.

Ver como conducía el balón recuerda rápidamente a la manera en que el gran Zidane lo hacía. Su pegada de balón con la derecha era temible y certera hasta el punto que cuando las escuadras de las porterías del St.Mary's Stadium estaban sucias, rápidamente aparecía Matt para limpiarlas.

Sus regates y su manera de correr parecían un baile perfectamente acompasado pese a que a veces "le pesara el culo" como el solía decir, y es que Matt tenía entre sus vicios el chocolate y la cerveza. A veces daba la sensación que era tan superior a sus rivales y a sus propios compañeros de equipo que le daba hasta vergüenza demostrarlo. Como si no quisiera abusar.

Además de toda su clase y de todo su arte, Matt nos dejó unas cuantas perlas a lo largo de su carrera:



"Me llamaban Le God, pero podría haber sido Matt The Fat [Matt el gordo]. Bebía tanta cerveza antes de los partidos que a veces me pesaba el culo. También me pasaba con las hamburguesas y el chili (…) Cuando me llamaban Dios, no sabía qué decir, sobre todo si me cruzaba con un cura…Yo no era Dios, claro."

"Es fácil jugar en el Manchester United o en el Liverpool. (…) Yo prefiero jugar al borde del abismo, con presión, sacando a un equipo de bajar a Segunda. Jugar en los mejores clubes es un reto bonito, pero hay un reto mucho más difícil: Jugar contra los grandes y ganarles. Yo me dedico a eso…"

Ronnie Ekelund, ex-compañero de Matt: "Antes de un partido en casa, Matt me comentó que el Chelsea le había hecho una oferta de tanto, tanto dinero, que la vida de los hijos de sus hijos estaría resuelta. - confiesa Ronnie Ekelund- Luego se calzó las botas, se puso la camiseta con el siete a la espalda y me dijo que él no valía todo ese dinero. Aquel día ganamos, Matt marcó un golazo, se duchó y se fue a casa. Nunca devolvió la llamada al Chelsea."

Mark Crossley, ex-portero del Nottingham Forest: Él era un seguro de vida, pero la pegó mal y lo paré. Ganamos 1-2 y, después del partido, Matt se me acercó y me dijo que algún día tenía que fallar, y que esperaba que mi parada me diera buena suerte para jugar algún día con mi selección.

Sin duda uno de los grandes,

El futbolista Argentino

Desde la apertura del fútbol europeo, y del español en particular al mercado extranjero, han sido muchos los futbolistas argentinos que han llegado a nuestra liga. Unos tuvieron más suerte que otros, unos dejaron una huella imborrable en la historia de sus clubs y otros tuvieron que salir escopetados ante las críticas de su afición, pero está claro que la gran mayoría llegaron con la etiqueta de cracks.

Hoy voy a hacer un repaso de los jugadores argentinos que al menos para mí más destacaron, si bien puede que no fuera por sus habilidades dentro del campo si por su personalidad y carisma fuera de él.

Comenzamos por la portería, donde sin lugar a duda destacan los dos "Monos".


Tranqui Oli, que lo tengo todo controlado, si tú supieras donde va a acabar el Oviedo.



El Mono Navarro Montoya, que aunque nacido en Medellín tiene ascendencia Argentina y es desde este país desde el que emigró al fútbol español para defender los colores de grandes equipos como el Extremadura, el Merida o el Tenerife. Portero singular donde los haya que alternaba grandes actuaciones con errores de bulto, pero que nunca dejaba a nadie indiferente.



El fútbol es mi hobbie, yo realmente soy músico.


El Mono Burgos, otro portero peculiar donde los haya, rockero en su tiempo libre, destacaba por su escasa pinta de futbolista y por moverse màs bien poco dentro del área(los entendidos decían que aguantaba muy bien el mano a mano). Este arquero fue un símbolo en el Atlético de Madrid que sufrió en el infierno para conseguir el ascenso previo paso por el real Mallorca.

Enfilando la defensa, es complicado destacar a uno de los muchos que pasaron por nuestra liga así que destacaré a estos tres:



Menudo equipazo por el que he fichado.


Oscar Ruggeri, que viniendo de haber ganado el mundial del 86 con la Argentina de Maradona, no se le ocurre otra cosa que fichar por el mítico Logroñes, para posteriormente ganar la liga al año siguiente con el Madrid. De pequeñito siempre le oía a mi padre hablar de las hostias que pegaba Ruggeri, y la verdad que viendo los videos que hay por ahí, no se quedaba corto con los comentarios sobre "el Cabezón".



Con la melena al viento


Fabrizio Coloccini, siempre se me había parecido al hermano mudo de los hermanos Marx, y no pensé que iba a ser un gran jugador, pero cuando ví la casta que tenía en el Alavés y en el Depor, la verdad que el tío me ganó. Gran rematador de cabeza, destaca por su agresividad y por llevar un tatoo de su madre en el corazón.





Has sido tú, te crees que no te he visto...




Roberto Fabián Ayala, con lo pequeño que era, daba unos saltos que le valieron el apodo de "El Canguro". Destacó por fichar el mismo verano por dos equipos diferentes y formar parte del Zaragoza que miraba a Champions y acabó descendiendo. Irony on. Fue uno de los mejores centrales de principios de la década.

En el centro del campo, es donde más aflora el futbolista argentino, es lo que en mi cuadrilla llamamos el "pisabolas", la cojo en una zona sin riesgo alguno, la piso, la piso, me recorto a mi mismo y se la entrego al mismo que me la dió. Sin ofender a nadie, creo que los argentinos son unos expertos en este juego, basicamente porque juegan en campos con el cesped muy alto lo que ralentiza mucho el juego e invita al "gambeteo". Volviendo al tema, destacaría a:





Pobre River...quien te ha visto y quien te ve...




Ariel Ortega, alias "el Burrito", la gente dice que actuaba de delantero, pero yo siempre le vi más como un enganche, palabra que gusta mucho a los entrenadores. Su falta de cabaeza y su predisposición al alcohol y la fiesta hicieron de él que no llegara a ser un "crack", aunque eso sí para mí ha sido un muy buen jugador. Destacó en el Valencia y disputó 3 mundiales con Argentina, aún sigue en activo aunque creo que no por mucho tiempo.


Aimar, Fofó y Miliki...



Pablito Aimar, "el payaso"- un jugador con una clase espectacular, que le encantaba pisar el balón, pero que nunca dio lo que se esperaba de él, quizá porque se le exigía mucho. Eso no le exhime de haber sido un gran jugador. Desde valencia, salió al Zaragoza, y ahora creo que juega en el Benfica. No le ví en la Copa America, y viendo el nivel del medio campo de Argentina, muy flojito tiene que andar Pablito para no ser seleccionado.



Vamos a la delantera, la parte que más me gusta, aquí si que hay una lista larga larga de jugadores. Desde Messi o el Pipita hasta el Turu Flores, pasando por la gallina Maxi Lopez, sin dejarnos al desagradecido Kun.



Yo sí soy un crack...



Carlos Duré- Integrante del mejor Extremadura de la historia compartía delantera con Manuel y formaron una dupla letal. Los dos eran menudos y rubios, y ambos marcaron una época que seguro que todos los aficionados extremeños recuerdan.



Ven aquí Edu Alonso que te vas a enterar...


Walter "Cuqui" Silvani- Retirado en 2006, también jugó en el Extremadura, aunque donde más destacó fue en el Salamanca, a pesar de que sus registros no fueron los mejores. Era el típico delantero luchador, que te aseguraba unos cuantos golitos por temporada. No sé a mí me resultaba simpático.


Argentina o España, yo lo que quiero es jugar un Mundial.


Juan Antonio Pizzi- Conocido por su etapa en el Barcelona, donde cada vez que salía del banquillo hacía gol, destacaba por ser un delantero potente, que iba bien de cabeza, no excesivamente rápido, pero sí con mucho olfato. En España terminó su carrera en Villarreal, después de haber destacado en Tenerife y Barcelona. Lo curioso es que siendo argentino, y considerado un crack en la liga española, fue con la Roja y no con la albiceleste con la selección con la llegó a disputar un Mundial, el de Francia en 1998.



Hasta aquí el repaso hoy, ahora espero vuestros comentarios para saber quienes fueron los que más os gustaron, decepcionaron, hirieron o hicieron gracia...



Ala a jugar a pala...

LA CORTINA DE HUMO


"¿Por qué mueve el perro la cola? Porque el perro es más inteligente que la cola; si la cola fuese más inteligente ella movería al perro".

Con esta frase comienza la película "La cortina de humo". Un film que nos pone en la siguiente situación: el presidente de Estados Unidos es acusado de acoso sexual pocas semanas antes de las elecciones generales, y sus consejeros y asesores de imagen deciden inventarse una guerra con un país de Europa del Este para desviar la atención. Para darle verosimilitud al asunto, contratan a un prestigioso director de cine, aderezan la ficticia guerra con llamativos efectos especiales, se sirven de punzantes eslógans e incluso finjen un secuestro tras las líneas enemigas.

De esta película me he acordado estos días, después de haber presenciado la demencial cadena de duelos entre Barcelona y Madrid y las tristes consecuencias de estos enfrentamientos. En vez de fútbol, solo hemos asistido a una realidad formateada ya que lo que realmente vende es decir que la UEFA está corrupta, que el Barcelona tiene tentáculos dispersos en todos los estamentos deportivos o que todos los resultados deportivos se deben a confabulaciones extradeportivas. Al igual que en la película de la que he comenzado hablando, tenemos una serie de actores jugando a vendernos una realidad comercial, pero que no es la realidad.

Por decirlo de alguna manera, nos hemos topado con la gente menos adecuada en el momento más inoportuno, creándose el caldo de cultivo perfecto para una gran campaña de manipulación y sectarismo. Por una parte tenemos como presidente del Real Madrid a un hombre con influencia, mucha más de la que pensamos. Porque una persona que abandona un club dejándolo en una pésima situación deportiva, y vuelve tres años después a la institución sin ni siquiera tener que atravesar unas elecciones, sin duda es un hombre con poder. Florentino Pérez quizá no sea un "ser superior", pero un hombre corriente no consigue que le acepten la recalificación de los terrenos de la antigua ciudad deportiva para levantar cuatro torres que le reportaron 100.000 millones de pesetas. Y es además un hombre que tiene el respaldo casi mayoritario de los medios de comunicación.

En un escalafón inferior tenemos a un entrenador como Mourinho, un hombre que parece eternamente resentido con el mundo, cuya única divisa es el triunfo sin importar la manera de lograrlo o la gente que tenga que llevarse por delante. Crispación y victorias unidas de la mano, los ingredientes perfectos para la prensa: cuando Mourinho no gana partidos, da titulares incendiarios. Porque, ¿cuando a un resultadista se le acaban los resultados, qué le queda?

Por otra parte, estamos inmersos en la llamada "guerra de los medios", en la que por lo visto los rehenes somos los espectadores. Por desgracia, los hombres al mando en esta guerra son gente de la calaña de Alfredo Relaño, Eduardo Inda, Juan Antonio Alcalá, Jose Ramón de la Morena, Paco García Caridad o Josep Pedrerol. Gente que no dudaría en vender a su madre al mejor postor e incluso ponerle un lacito si con ello consiguieran un oyente más, un espectador más o la venta de un periódico más. Gente que crea campañas en contra de futbolistas y entrenadores que les niegan entrevistas exclusivas, gente no duda en alterar imágenes y distorsionar hechos pero ni se plantea replantearse sus ideas fijas, gente que difunde odio y odia el deporte. Gente peligrosa.

Y cuando las cosas van mal dadas, esta gente mueve la cola. Coincidiendo con la época victoriosa del Barcelona en los últimos tres años, la sucesión de campañas des-informativas ha sido nauseabunda. Para no entrar en profundidad en cada uno de los casos, simplemente recordaré:
  • La persecución a la que Eduardo Inda sometió a Ramón Calderón ("el imputado", para el director de Marca) por un supuesto fraude en el voto por correo. Él fue el primer chivo expiatorio de los males del Madrid y los éxitos del Barcelona.
  • Otros medios decidieron apostar más fuerte. La invención del "villarato", una supuesta trama ideada por Alfredo Relaño consistente en una desquiciante trama destinada a favorecer sistemáticamente al Barcelona, es ya historia (negra) del periodismo. Si el Barcelona gana se debe a las ayudas del villarato, si el Madrid pierde se debe a la persecución del villarato, si el Madrid gana es una forma de compensación del villarato para causar un mal mayor en un futuro al rival del Barcelona. Una teoría muy fructífera ya que CUALQUIER hecho se podía tribuir a esa entelequia llamada villarato.
  • Celoso por el gran calado del "villarato", Inda intenta crear nuevas campañas para unir a los aficionados bajo un lema. Surje así el "canguelo": la teoría de que el miedo a la victoria y la presión del real Madrid son factores que provocan la erosión del Barcelona.
  • Un punto de ruptura se produce con la consecución de la Champions League por el Barça en 2009. Si las victorias caseras se deben al villarato, las victorias en Champions son obra del "euro-villarato". Una teoría de Alfredo Relaño compartida y ampliada por Tomás Roncero en el programa "Punto Pelota", y que a lo largo de los años ha ido adquiriendo ramificaciones, como el "comando Qatar", el "comando Unicef", el "comando Platini"...
  • La diarrea informativa también llega a las ondas radiofónicas: gracias a fuentes dudosas y anónimas, Juan Antonio Alcalá (COPE) siembra la duda de que las victorias del Barcelona se deben a prácticas dopantes generalizadas.
  • Pero no sólo se lanzan acusaciones falsas y se distorsionan hechos, también se falsean imágenes. Si en tiempos pasados se utilizaba el retoque fotográfico para hacer desaparecer a enemigos políticos, el diario AS le da una vuelta de tuerca y lo emplea para hacer desaparecer futbolistas en jugadas dudosas a favor del Barcelona a mayor gloria del villarato.

En definitiva, que el perro mueve la cola y espera que miremos embobados. Durante años han estado meneando la cola del villarato, la cola del canguelo, la cola del cambio de ciclo, la cola del mear colonia, la cola de Ovrebo, la cola de Preciado, la cola de los rivales que se dejan ganar, la cola de los teatreros, la cola de los horarios de los partidos. La han meneado y hemos estado mirando su hipnótico movimiento como gilipollas. Porque en estos años no hemos hablado de los golazos de Messi, las jugadas de Xavi, las paradas de Casillas, las carreras de Cristiano Ronaldo, la garra de Rooney, la elegancia de Pirlo, el oficio de Gerrard o la veteranía de Del Piero, las actuaciones de tantos y tantos buenos futbolistas y entrenadores; como los medios deportivos esperaban que hicieramos, hemos hablado de todo menos fútbol. El grado de intoxicación, desinformación, abusos, insultos y mentiras al que hemos llegado es increíble, y lo peor de todo es que parece ser que hay que dejar que siga la corriente en aras de la libertad de expresión.

Al final uno se acaba entonces preguntando si la realidad existe o nos hemos encargado de crear una diferente. ¿En el resto de Europa tienen la misma percepción que nosotros sobre lo que pasa en nuestro fútbol? ¿La prensa deportiva cuenta los hechos o es el mundo del deporte el que actúa de acuerdo a lo que cuenta la prensa? ¿Hay una alternativa a la bipolaridad futbolística e informativa en nuestro país?  ¿Cuál es verdaderamente la realidad tan temible que se esconde tras la cortina de humo? Muchas preguntas y pocas respuestas. Esto me lleva a acabar de la misma manera que comencé, con una cita de la película mencionada:

"¿Qué recuerda la gente sobre la guerra del golfo? Un vídeo de una bomba que cae y hace volar un edificio... pero podría ser una maqueta"

Eh tío, rúlame ese Makanaky.

Quizá si comienzo la entrada diciendo que vengo aquí a hablar del futbolista Cyril Makanaky pocos sepan de quién coño voy a hablar. Si hiciera esto mismo en un blog de fumetas seguramente la popularidad del personaje fuera mucho mayor y es que para entender todo esto hay que empezar desde el principio.

Makanaky dio el salto a la fama al formar parte de la selección camerunesa en el mundial de italia 90. Coincidió con una gran generación que logró alcanzar los cuartos de final de la copa del mundo y convertirse en la gran revelación del torneo. Como suele suceder en una competición de tamaña repercusión los clubes siempre se apresuran en fichar a todos los integrantes de la selección sorpresa con dispares resultados. Unas veces te sale bien la jugada y otras consiguen nutrir a grandes clubes con jugadores mediocres.
Tras terminar el mundial Makanaky fue rápidamente fichado por el málaga, que por aquel entonces jugaba en segunda. En lo que no debieron reparar los ojeadores del club andaluz es que Makanaky fue convocado para el mundial habiendo jugado tan solo 4 partidos en toda la temporada. Algo raro se estaba gestando...

Como era de esperar Makanaky, la gran estrella del málaga, defraudó. En su primera temporada acabaron cuartos, en el segundo año descendieron a segunda B.
Pero por lo que Makanaky caló en la afición malacitana es por ser un habitual de bares y discotecas de la zona, aparte de las compañías. Malas.
Por lo visto era común verle fumando algún porrillo en sus salidas nocturnas. Tanto era así que en málaga se empezó a conocer a los petas como 'Makanakys' y poco a poco ese divertido nombre en clave se fue expandiendo por toda españa hasta el punto que quien me dio la idea de escribir todo esto fue un colega mio al que oí decir aquello de Makanaky. Al colega ni le gusta el fútbol ni mucho menos sabe quién es Ciryl Makanaky.


Su pasión por la fiesta y la crapulencia se ha extendido más allá de nuestras fronteras y en chile también se conoce como Makanaky a aquellos muchachos bien dotados. Y sí, me refiero a aquellos de buen pollón.

Por último y como reseña final sobre este curioso personaje debo hablar de la conocida como 'Maldición de Makanaky' que recae sobre el barcelona de ecuador.

Cuenta la leyenda que la retirada del fútbol de Makanaky en 1997 se debió a los problemas de pago con su último club: el barcelona de ecuador. Al parecer a Makanaky se le adeudan 200.000 dólares y viendo que no los iba a poder conseguir, lanzó una maldición sobre el club que le impediría ganar ningún título hasta que se le pagase.
No se sabe a ciencia cierta de qué se trata la maldición; hay quien dice que enterró unos huesos cerca del estadio, otros que pidió a dos brujas del equipo rival que maldijesen el club e incluso hay una última versión que dice que envío una camiseta del barcelona de guayaquil a un brujo camerunés para que les sumiera en la desdicha.

Sea como fuere, el barcelona ha pasado de ser el club más laureado en ecuador a no ganar nada desde 1997. La directiva del barcelona ha tomado cartas en el asunto y ha contratado a la virgen de la Dolorosa para que les ayude a eliminar el infortunio que pesa sobre el club. (No sabía que se podía contratar a una virgen)
También es habitual ver como brujos y santeros se reunen a las puertas del estadio para eliminar de una vez por todas el maleficio.

En bilbao tenemos a la virgen de Begoña, pero lleva casi 30 años sin hacernos caso.

Así que ya sabéis queridos lectores, no os metáis con Makanaky que lleváis las de perder y si os gusta fumar, fumaos un Makanaky como homenaje a nuestro camerunés favorito.

El pasado te puede jugar malas pasadas

En el partido del pasado sábado entre el Osasuna y el Atlético de Madrid, se produjo la curiosa jugada en la que Juanfran Torres pidió fuera de juego en el gol marcado por su compañero Diego Costa. Como diría nuestro compañero Yakito, un auténtico LOL.
Y es que se da la circunstancia de que Juanfran, quien fue fichado en el pasado mercado invernal por el Atletico de Madrid, había disputado las últimas 4 temporadas con el conjunto rojillo, y se ve que el subconsciente le traicionó en esta ocasión.

Aquí os dejo el video con las imágenes...

EL TIQUI-TACA: APARICIÓN, DESAMBIGUACIÓN Y GENERALIZACIÓN



La palabra que define en estos días al mundo de la información es la inmediatez: queremos las noticias al momento porque no hay tiempo que perder, no hay tiempo ni para valorar las informaciones, ni contrastarlas ni cuidarlas. Tenemos mil y un maneras de enterarnos de lo que está sucediendo en el mundo al instante pero realmente cada vez nos enteramos de menos cosas. Esto viene a cuento de otro de los efectos secundarios de esta época de desinformación: la pérdida de significado de las palabras. Es decir, que ya no importa la manera de contar ni las palabras que utilizemos, lo importante es contar lo que sea. Y de la misma manera utilizamos palabras que no tenemos ni pajolera idea de lo que realmente significan.

Cuando hace dos años murió Andrés Montes, su epitafio en casi toda la prensa española fue: "dice adiós el creador del tiqui-taca". Siempre he pensado en cuánto mal ha hecho esta maldita palabra al fútbol y en cuan equivocada está la gente que piensa que él fue su inventor. Pero lo cierto es que (según yo tengo entendido) fue el ex-entrenador vizcaíno José María Maguregui la primera persona que utilizó el término, con un significado totalmente diferente.
Maguregui -longevo entrenador de equipos modestos como Sestao, Celta de Vigo, Racing de Santander o Espanyol- se refería al tiqui-taca para definir ese partidillo a lo ancho del campo que se jugaba en los entrenamientos después de los ejercicios físicos. Y por extensión, también llamaba de "tiqui-taca" al juego que practicaban algunos equipos basado en tocar el balón a ras de hierba pero sin llegar a ningún lado. Eran los años 80 y el tiqui-taca era por así decirlo la acepción futbolística del dicho "mucha salsa, poca carne". Un tipo de fútbol caracterizado por la pachorra, el toque excesivo, en definitiva: demasiado artificio para tan poco resultado.
Con el paso de los años otros entrenadores como Javier Clemente también añadieron esa palabra a su vocabulario. Todos conocíamos el estilo de juego de Clemente, y como él estaba en contra del tiqui-taca se llegó a la generalizacíon de que si Clemente estaba en contra del tiqui-taca era lo mismo que decir que "el juego directo y el colgar balones es lo contrario del tiqui-taca". Y así la palabra adquirió una nueva acepción: fútbol asociativo, dinámico y vertical.

La palabra pasó unos años de ligero ostracismo hasta que llegó Andrés Montes para martillearnos los oídos con mil y un chascarrillos que -desgracidamente- calaron muy hondo en el inconsciente colectivo. "Tiqui-taca, Salinas, tiqui-taca". La palabra estaba de nuevo en la boca de todo el mundo, la podías oír en la televisión, en el trabajo, en tertulias de bar, en el colegio... Ahora el tiqui-taca era ya definitivamente el sumum del fútbol, lo más alto a lo que se podía llegar. El Barcelona ganaba ligas y copas de europa, el Barcelona era el tiqui-taca, y el tiqui-taca era la hostia. El declive del Barcelona de Ronaldinho amenazó con acabar con el término, pero entonces la selección española y de nuevo el Barcelona volvieron a devolverlo a la primera plana.



Y ahora, ¿en qué situación estamos? Pues ahora que nuestra cortedad de miras nos ha hecho aceptar la "verdad" del tiqui-taca y su nexo de unión con el Barcelona, es la hora de acabar con la mentira del tiqui-taca y del Barcelona. Se oyen cosas como "el fundamentalismo del tiqui-taca", "parece que el tiqui-taca es la verdad única del fútbol" u otras generalizaciones por el estilo. Dicho de otra forma, los caballeros templarios del tiqui-taca son igual de ignorantes que los defensores a ultranza del "patapum p´arriba", por el sencillo hecho de que ni una ni otra cosa existen, ni ningún entrenador ordena a sus jugadores jugar al tiquitaca, o jugar al patapúm. Simplemente son términos que la prensa utiliza para su conveniencia, y que como hemos visto pueden cambiar de significado también a conveniencia.

En definitiva, el tiqui-taca nació como un término calificativo para una parte de la preparación futbolística, se extendió de forma peyorativa a valorar a un estilo de fútbol rimbombante pero falto de contenido y en último término paso a ser la bandera del fútbol cómo arte. Poco a poco entre ciertos sectores de la prensa y el deporte vuelve a tener connotaciones negativas y es probable que en pocos años pierda totalmente su significado y vuelva al anonimato de las palabaras olvidadas. Esperando que alguién invente otro término que dé de comer a los periodistas menos dotados y a los aficionados más aborregados.

Odio eterno al fútbol moderno

Tras varios meses sin inspiración para escribir nada congruente, aprecen nuestros queridos amigos de la LFP con la brillante idea de querer parar el fútbol, porque se niegan a emitir un partido en abierto, tal y como recuerdo yo desde que tengo consciencia.

Recuerdo que hace años, el partido de los sábados era a las 8 y por las autonómicas, entonces los que se quejaban eran los del sector hostelero, argumentando una reducción en las recaudaciones por la hora del partido, estoy seguro de que ahora ya no se quejan.

Lo que tiene más miga del asunto es que la liga le exige al Gobierno que se implique en el asunto, y es que el mismo Gobierno que permitió la conversión de los clubes en Sociedades Anónimas Deportivas, fue el que provocó el principio del fin del fútbol como lo conocíamos.

Antes de la conversión de los clubes en SAD, la deuda total de estos no llegaba a los 600 millones de euros(tirando por lo alto), pero es que en la actualidad la deuda global de primera y segunda división supera los 3600 millones de euros, y todo esto obviamente bajo el beneplácito de nuestro querido Gobierno.

Quiero decir con esto, que cuando a la LFP no le salen las cuentas lo más fácil es pedirle al papá Estado que le eche un cable. Por mí, el Señor Astiazarán y sus amiguitos estaban en la calle hace tiempo.

Y después de la crítica, os voy a poner un vídeo que me ha pasado mi colega Dani, que después de la mala hostia de los últimos días, he de reconocer que me ha alegrado la semana.
La verdad os lo recomiendo empecinadamente, me parece super original, y además es de fútbol...Estoy seguro de que a nuestros colaboradores y seguidores os va a encantar...

Odio Eterno al Fútbol Moderno

CUIDADO CON LOS DESCONOCIDOS

 
La semana pasada, en el partido en el que el Tottenham Hotspurs dejó encarrilado su pase a los cuartos de final de la Champions League, tuvo lugar una trifulca de Gattuso con el segundo entrenador del equipo inglés. El centrocampista italiano, muy alterado durante todo el partido, se encaró con Joe Jordan, ayudante de Harry Redknapp, y le propinó un pequeño cabezazo que dio inició a una multitudinaria tángana sobre el césped de San Siro.

La mayoría de la gente que vio las imágenes se echó las manos a la cabeza pensando "Ay, pobre hombre, como Gattuso toque a ese señor tan mayor e indefenso le manda al otro barrio". Pero lo que esa gente no sabía, y quizás Gattuso tampoco, es que ese tal Joe Jordan fue hace años uno de los futbolistas más duros del momento, jugando entre otros muchos equipos.... ¡en el mismísimo AC Milán!
 
Joe Jordan en el  centro y Brian Clough a la derecha.  Este último duró poco

Jordan empezó jugando al fútbol en un modesto equipo de su Escocia natal hasta que, con 19 años, fue reclamado por el mítico Leeds United dirigido por Don Revie (para más información podéis ver la película The Damned United). En este equipo Joe Jordan pudo dar rienda suelta a sus máximas cualidades, ya que era un delantero rudo, duro, muy combativo y sobre todo muy peligroso en los balones aéreos. Vamos, que era un jugador que iba a por todas, sin miedo a meter la pierna, la cabeza o lo que fuese. La viva imagen del potente Leeds de los años 70. En el equipo de Elland Road formó la llamada "mafia escocesa" con otros jugadores como Lorimer, McQueen y sobre todo Billy Bremner, la auténtica alma del equipo y nombrado mejor jugador de la historia del Leeds. En este equipo no había medias tintas y los entrenamientos eran tan o más disputados que los partidos oficiales, y Jordan puede atestiguarlo, ya que en una sesión preparatoria recibió un fuerte golpe en la boca que le dejó sin los dientes delanteros, dándole a su aspecto ese típico toque escocés tan entrañable:


Jim Leighton, Joe Jordan y Craig Burley. ¡Hijos de Escocia!
 
Joe Jordan - o "Tiburón", como se le empezó a conocer desde entonces- recibió en 1981 una oferta del AC Milán, que en aquellos tiempos no hacía honor ni por juego ni por resultados a la gran historia del club. Sin embargo Jordan decidió unirse a los rossoneros, siendo uno de los jugadores más destacados del equipo en una temporada de infausto recuerdo ya que el Milán descendió a la serie B. A pesar de ello, el escocés fue un jugador importante durante sus dos años en Milán, como lo demuestra el hecho de que fuera nombrado uno de los 110 jugadores más importantes de la historia del club.
 

Y con la selección escocesa tampoco se quedó corto. El es el único jugador de esta selección capaz de anotar en tres mundiales diferentes. Por ello y por su gran entrega y dedicación se le conoce en las islas como "Braveheart Joe".

Con estos datos en la mano, es posible que Gattuso sea más precavido en otra ocasión, ya que en otra época no muy lejana quizás el "Tiburón" Joe Jordan se hubiera comido al rinoceronte italiano.

EL PICHICHIARATO

Practicamente desde el inicio de la liga se preveía que Messi y Cristiano Ronaldo iban a mantener una dura lucha por el galardón de máximo goleador de la liga española. Todos los pronósticos han sido acertados ya que la pugna entre el argentino y el portugués es una constante semana tras semana.

Sin embargo, a final de temporada podría darse un curioso hecho, que Messi obtuviera la Bota de Oro como máximo goleador en solitario del continente, pero tuviera que compartir el trofeo Pichichi con Cristiano Ronaldo. Esto se debe a la creativa contabilidad del diario Marca, que en la 4ª jornada de liga le otorgó a Cristiano un gol tras un lanzamiento de falta que rebotó en Pepe despistando al guardameta.  Desde ese momento había dos realidades paralelas: la del diario MARCA y la del resto del mundo, separadas por ese polémico gol. Después del hat-trick conseguido por Messi el sábado y los dos goles marcados por CR7 ayer mismo, parecía que los dos astros estaban ya igualados en el top de los cañoneros de la liga, ¿o quizás no? En el periódico de hoy, el MARCA ya se apresuraba a anunciar que el delantero portugués sigue comandando la clasificación con 25 goles.
Veamos lo que dice el diario As. En su editorial de hoy, Alfredo Relaño habla sobre el enfrentamiento goleador entre los dos jugadores y recalca que ambos llevan 24 goles (por lo que suponemos que entiende que el gol de la polémica es autoría de Pepe). El Mundo Deportivo y Sport también coinciden en el empate a 24 goles.
Lo cierto es que si a día de hoy hojeamos cualquier diario deportivo que no sea el Marca, podremos ver que CR7 y Messi están igualados a 24 goles en lo más alto de la tabla de realizadores. Salgamos de nuestras fronteras y entremos en la página web de La Gazzetta Dello Sport. En la sección de la liga española, nos dirigimos a la tabla de máximos goleadores. La cosa está clara:
Leyendo el "The Sun" inglés el resultado es el mismo, en Francia "L´Equipe" da los mismos datos de 24 goles para los dos jugadores, y lo mismo sucede si seguimos leyendo el resto de diarios deportivos europeos.
En la web de la UEFA se menciona la clasificación de la ESM (la asociación de revistas deportivas que decide el ganador de la Bota de Oro), y estas son las cifras que manejan:

Y en el acta arbitral de ese partido Real Sociedad-Real Madrid, por supuesto, el gol de la discordia se le otorga a Pepe. La pregunta que me planteo es la seguiente, si prácticamente todos los medios de comunicación coinciden en que Cristiano Ronaldo no lleva 25, sino 24 goles, ¿por qué MARCA se empeña en seguir yendo a contracorriente? ¿se trata de una nueva cruzada de Inda o es una manera de querer ser más chulos que nadie? Una de las posibles respuestas que me rondó la cabeza es que lo hacen por que son unos ultramadridistas recalcitrantes, y por ello me dirigí a un medio proclive a los merengues: la página oficial del Real Madrid, pero ... ¡incluso su propia web informa de que Cristiano lleva 24 goles! La cosa ya está clara, el MARCA sigue superándose día a día. Por eso su página web se colapsa cuando el Madrid cae derrotado, como ocurrió el año pasado contra el Lyon o el Barcelona, por eso Eduardo Inda tuvo que eliminar la posibilidad de que los internautas comentaran sus videoblogs, por eso tienen a Leticia Sabater en la nómina de colaboradores, por eso Santiago Segurola parece un bicho raro en medio de una redacción en la que se encuentran Inda, "Látigo" Serrano o Roberto Gómez. Por eso. Por eso Cristiano Ronaldo es el pichichi pero no el máximo goleador.

*****Actualizo para comentar que ayer 7 de febrero en las cibercharlas de Marca se le preguntó a Santiago Segurola -el redactor encargado de hacer la crónica del famoso partido entre Real Sociedad y Real Madrid- por la polémica en torno al gol. Su respuesta fue de lo más clara:

Buenos días Santiago, la web de Marca pregunta hoy quién ganará el Pichichi. Un cara o cruz en mi opinión, los dos principales candidatos tienen unos números bestiales. ¿Porqué el diario Marca no toma los datos oficiales para su premio y usa, sin embargo, los suyos propios? Si los dos llegan igualados a final de temporada, el gol de Pepe/Cristiano Ronaldo en Anoeta dará que hablar... ¿De quién es ese gol? No debería ser cuestión de opinión, sino de datos oficiales. Enviada por Xu7 (07/02/2011 12:03) Hace un par de semanas dije que atribuí el gol a Cristiano en Anoeta al pasar rápidamente las notas y no ver la repetición de la jugada. Si me corresponde a mí revisar ese gol, que no sé si me corresponde, lo haré encantado, aunque en el periódico de aquella fecha figure como gol de Ronaldo. Fue un desvío de Pepé y ya está. 


Racing Albacete. Culo a tope de goles.

Muchas veces miramos la jornada liguera y decimos 'Pues me veo el de mi equipo y del resto de partidos no me interesa ninguno'. A priori siempre hay partidos entre un equipo de la zona baja y otro de la zona media-baja que huelen a pestiño desde el momento de su concepción.

Por suerte, en ocasiones parece que incluso a ambos equipos les da igual el propio partido, se desmelenan y empiezan a jugar sin preocuparse de las defensas, simplemente pendientes de meter goles como si estuvieran en el patio del colegio y es ahí donde dan un espectáculo digno de ser recordado.

Esto que estoy diciendo por suerte o por desgracia suele pasar mucho en los encuentros de copa en los que a ninguno de los dos equipos les va la vida en ello, saben desde el principio que no van a ganar dicho torneo y juegan con un nivel de relajo en defensa que termina convirtiendo los encuentros en auténticos partidazos. El caso del Almería-Mallorca de este año con un 4-3 y un 3-4 es un buen ejemplo.

Pero quería hablar de un caso singular; el de un Racing de Santander vs Albacete de la temporada 95/96, aquel día los dos equipos empataron a cinco.


Admítelo, nunca has jugado un Racing Albacete en el FIFA

Y es que en aquel partido debió haber mas fallos defensivos que gazapos en la película Comando.
Repasando las alineaciones recuerdo a un Racing con rusos y jugadores del este de la época post-Dimitri Radchenko con Popov, Faizulin y Zigmantovic. También andaban por ahí el eterno Ceballos bajo palos y Billabona.

El fútbol del este, sin duda el mejor del mundo.

Del Albacete también hay miga; entrenados por un Benito Floro en la época en que era visto como una especie de mago del fútbol capaz de convertir cualquier equipo medio en un aspirante a título.
Pero de entrenadores no vive el fútbol y en el cesped estaban la jóven promesa Escaich, Maqueda, Zalazar (creo que era el tipo que rompía la pelota en cada falta, aunque a este igual le estoy confundiendo con 'el Toro Aquino'), Bjeliça y me quedo con la duda de no saber si ese Luna que aparece es el que provenía del Sporting de Gijón.

Desde entonces hasta hoy no he vuelto a ver un empate a cinco en liga, creo que es el record, que nunca se ha empatado a seis. De hecho al Albacete le llevó trece años volver a marcar cinco goles fuera de casa.
Han pasado quince años de toda esta historia, espero que pronto podamos volver a ver un orgasmo de fútbol de ese calado en cualquier campo de primera.

RACING: Ceballos, Luis, Pablo, Roncal (Faizulin 23'), Billabona, Alberto, Zigmantovic (Tomás 34'), Txema, Iñaki, Popov y Herrera
ALBACETE: Marcos, Manolo (Escaich 83'), Alejandro, Tomás, Vasiljevic, Maqueda (Zalazar 55'), Jesús, Josico, Luna, Bjeliça y Riesco
GOLES:
1-0: Billabona (1')
1-1: Bjeliça (p.) (10')
1-2: Bjeliça (11')
2-2: Faizulin (45')
2-3: Josico (52')
2-4: Coco (67')
3-4: Popov (73')
4-4: Alberto (75')
5-4: Alberto (80')
5-5: Luna (87')

Cristina Cubero apestas

Hace un rato estaba viendo Punto Pelota, y he escuchado hablar a Cristina Cubero sobre el partido de hoy en el Camp Nou, y lo unico que se me viene a la cabeza es que apesta.
Esta tia tiene tan poca noción de fútbol que todavía cuando el Athletic hace un esfuerzo increible y consigue lo que no han hecho ni el Madrid de los cracks, ni el Chelsea, ni el Valencia, ni el Atletico, ni el Villarreal, ni nadie, miento solo el Hercules, y la tia sigue dándole palos al Madrid y quitandole méritos al Athletic...

Al César lo que es del César, el Barca es un señor equipo, muy superior al resto, pero en Copa, el Athletic se merece el mayor de los respetos, por tradición, historia reciente y pasada, y porque es nuestra competición...asi que señorita Cubero, hagase mirar la palabra informar y objetividad en el diccionario, y dedíquese a otra cosa...porque de verdad que oirle hablar APESTA.

Me ha puesto de muy mala hostia...si ya la información deportiva en este país esta dualizada, solo falta que para un día que hacemos algo medio interesante venga esta tia a tocarnos las narices...

Estoy indignado...y ahora tengo más ganas para la vuelta...que todavía damos la sorpresa...No hemos ganado, solo hemos defendido, pero hemos jugado con nuestras armas y merecemos un respeto, y lo de esta tia es lamentable...

He dicho...

Sentimientos encontrados


Quien más quien menos, esperaba el partido de ayer con cierta incertidumbre. Aparte de la bravuconería de ambas aficiones, nadie sabía a ciencia cierta lo que podía ocurrir en el clásico.

Esa es la parte positiva de no involucrarte emocionalmente en un partido de ese tipo, el no ser hincha de ninguno de los dos y no profesar mucho aprecio a ese tipo de clubes, te permite ver los toros desde la barrera, y disfrutar del partido sin mayor interés que ver fútbol.

Muchas veces, cuando se producen este tipo de enfrentamientos, tengo la sensación de que el hincha piensa más en joder al prójimo que en su propio equipo. Parece que lo importante no es que tu equipo gane, sino que el contrario pierda, y es ahí donde me parece que se pierde la perspectiva y el fair play de este deporte.

Todos sabemos que hoy los aficionados del Barca están exultantes, mientras que los merengues no estarán muy contentos, pero ¿que hay de los aficionados del resto de equipos de primera y segunda división?

Os dejo una encuesta para valorar que sentimiento os produce el resultado del Barca- Madrid.
Animaos y participad....

Nobuhiro Takeda y la agonía de Doha.

Más de una vez he visto en 'la Siete' el programa japonés de entretenimiento Banzuke. Presentado por Kei Kato los concursantes tendrán que superar una serie de pruebas jodidísimas en las que muchos días termina el programa y no tenemos ni un sólo ganador. Como bien dice la absurda entradilla del programa 'es la competición definitiva entre el hombre y el obstáculo'.
En resumen, una especie de humor amarillo con mayor dificultad.


Pues estas gilipolleces son las que veo yo por la tele.

El motivo por el que escribo esto es porque una mañana empezaron a desfilar una serie de concursantes curiosos: tres jugadores de beisbol, un surfista y un futbolista. Ahí me dije, este ni es futbolista ni es nada, otro como el del Pardo; se trataba de Nobuhiro Takeda.

Concursaba en la prueba Giant Ball, que tampoco es una prueba que exija demasiada fuerza física o resistencia, mas bien equilibrio y coordinación. Algo que un futbolista o cualquier anormal puede intentar, ya que en algunas pruebas tienes que ser capaz de hacer equilibrios en un monociclo o hacer el pino. Cosa que un servidor es incapaz de hacer.

La sorpresa llegó a posteriori, una vez terminado el programa decidí buscar el nombre de Nobuhiro Takeda en google y la wikipedia me instruyó.

Por lo visto Takeda militó toda su carrera en equipos japoneses, y allí es bien recordado porque fue un delantero notable desde el 86 hasta el 01, donde anotó 142 goles.
Como internacional jugó 18 partidos y marcó un golito.

Pero por lo que el pueblo japonés no olvida a Nobuhiro Takeda es por haber participado en el partido denominado como 'La agonía de Doha'.


En la clasificación para el mundial de estados unidos las seis mejores selecciones de los grupos de clasificación de la zona asiática terminaban enfrentándose en un grupo en Doha donde sólo los dos mejores obtenían el billete para USA 94.
En la última jornada Japón lideraba el grupo a falta de su partido ante Iraq. En segundo lugar estaba Arabia Saudí y en tercer lugar Corea del Sur.

El partido ante Iraq fue cómodo para la selección nipona: se adelantaron en el minuto 5 y llegaron al descuento con un resultado de 2-1 favorable. Pero los partidos hay que jugarlos hasta el final y en el descuento de aquel encuentro Salman logró el empate para Iraq.
Corea que había ganado su partido empató así a Japón en la clasificación y se metió en el mundial por la diferencia de goles.

Aquel partido fue dramático para Japón, rozaron con la punta de los dedos una clasificación que de haberse conseguido habría sido la primera participación japonesa en un mundial. Desde entonces a aquel partido se le recuerda como 'La agonía de Doha' y curiosamente en Corea lo recuerdan como 'El milagro de Doha', cada uno cuenta la feria según le ha ido.


Nuestro protagonista salió de suplente en el minuto 81, justo a tiempo para vivir el desastre.
Actualmente trabaja en la televisión japonesa.

Desde entonces hasta ahora Japón se ha clasificado para todos los mundiales. Aún así es curioso como en el fútbol un nombre te lleva a un equipo y un equipo a una historia.