Mostrando entradas con la etiqueta ciclismo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ciclismo. Mostrar todas las entradas

David Zabriskie, entre comics y bicicletas.

Muchas veces, durante esas maratonianas sobremesas bicicleteras con de Andrés y Delgado, te da por fijarte en pequeños detalles del pelotón; te paras a pensar cómo están estructurados los equipos, te fijas en quién baja a por bidones para el resto de sus compañeros, quién charla con los demás colegas del pelotón sean compañeros o rivales, quién lleva algún distintivo de campeón de algo en su maillot o casco y la verdad es que os tengo que confesar que a pesar de ver a todos estos personajes durante unas cuantas horas si me cruzo por la calle con el 90% de ellos sería incapaz de reconocerlos. Entre el casco, las gafas y el traje no tengo ni idea de qué aspecto tendrán fuera de la carrera.

El año pasado en medio de todas esas horas de ciclismo ininterrumpido hubo un personaje que me llamó bastante la atención, y entre todo el pelotón me dije ¿quién coño lleva ese bigote?


Se trataba de David Zabriskie. Lol, de Utah tenía que ser.
No os creáis que no le conocía, a poco que os guste el ciclismo os sonará de ver en el Garmin al campeón de Estados Unidos contra el crono; Es él, Zabriskie. Además los más observadores habréis visto cierto parecido entre la rueda lenticular que lucía el año pasado y el escudo del capitán américa.
Este año ha revalidado campeonato pero en vez de seguir con el escudo en la rueda, directamente se lo ha puesto en el casco. Ante este detalle sólo me queda dedicarle un artículo y buscar información suya en internet. ¡Y menudo crack está hecho!

Entre las bicis del Garmin las suyas destacan especialmente.

Antes del tour Zabriskie fue noticia en el mundillo por hacerse vegano. Quizá haya algún vegano que nos esté leyendo y piense '¿Y por esto es noticia?'. Pues , en un deporte en el que se mide tanto la alimentación y los esfuerzos choca que alguien rechace las proteínas de la carne y tenga que sacrificar tanto su dieta. Sólo conozco otro exciclista que rechazaba la carne; Robert Millar.

De todos modos es casi tan curiosa la noticia como el por qué de su decisión: Vio documentales sobre el trato que sufren los animales en las grandes granjas industriales y decidió que estaba mal lo que hacía. Además unos exámenes médicos le diagnosticaron una propensión alérgica a ciertos alimentos, así que simplemente dejó de comer carne. Lo mejor de todo es que según ha reconocido desde que es vegano se fija mucho más en su alimentación, antes simplemente trataba de llevar una dieta equilibrada y ahora presta mucha más atención a lo que consume.

Pero lo mejor llegó cuando entré en su web y le conocí un poco más.
Normalmente los deportistas cuelgan en su web fotos en las que aparecen triunfando dentro de su deporte, fotos de algún partido que son bonitas, fotos vanidosas de alguna sesión para alguna revista o artículos suyos escritos por otra persona. En definitiva cosas que no te dicen nada que no sepas.
En la web de Zabriskie sin embargo tienes fotos como las que puedes colgar cualquier día en facebook; fotos haciendo el retra o fotos de alguna cosa que has visto. Ahí es dónde de verdad se conoce a la persona.

Zabriskie no usa Batmóvil, usa Batbici.

Haciendo una recapitulación rápida sin duda las que más me han gustado son las del Batmovil de la serie de 1966 y las diferentes instantáneas sobre Hellboy; ya sea con la gabardina de la peli, con el director de la misma, Guillermo del Toro o leyendo un cómic en una concentración.


Por supuesto, como fan de la cultura Pop no se ha perdido la Comic Con que se ha celebrado hace poco en San Diego...

Aparte de las fotos curiosas, David Zabriskie se ha ganado mi admiración por su blog. Lógicamente está en inglés pero si os paráis a leerlo pronto os daréis cuenta de que además de notarse que está escrito por él, está bastante bien redactado.
La lectura de la presentación de Thor Hushovd en el tour y la caida que le hizo abandonar la carrera es interesantísima.

Esperemos ver a este megacrack del ciclismo mundial este año en La Vuelta. Mi corazón se lo ha ganado y es, sin ninguna duda un digno merecedor de una entrada en putofutbol.

Érase una vez Miguel Indurain.

Este año se cumple el vigésimo aniversario de la primera victoria de Miguel Indurain en el tour de Francia. Para celebrar tan maravillosa efeméride había pensado hacer un pequeño resumen de sus tours en distintas entradas pero sería un trabajo faraónico y poco reconocido, así que mejor hacer un resumen de sus gestas en una sola entrada y disfrutar recordando (o descubriendo) sus mejores momentos a lo largo de aquellos cinco años que tan buen sabor de boca nos dejó. Espero que os guste, y sobre todo espero que quién no recuerde o no sepa quién fue Miguelón descubra el buen hacer de un ciclista legendario.


TOUR 1991
En el tour del 91 Indurain partió como una joven promesa, alguien que había dado que hablar pero en ningún momento se contaba con él para la general individual, así que sin hacer mucho ruido comenzó haciendo de las suyas en las etapas individuales contra el crono, ganando las dos que había aquel año y situándose entre los mejores de la general. Como curiosidad debo comentar que aquel año hubo una 'etapa doble'; a la mañana hubo una contrareloj por equipos corta y a la tarde una etapa llana un poco más corta de lo normal.

El día que Indurain se alzó con el amarillo y entró en las quinielas de todos fue en la etapa que finalizaba en Val Louron. Miguel era un buen escalador, pero dónde siempre controlaba la carrera era en los descensos. Y fue en el descenso del Tourmalet dónde probó fortuna y se escapó del grupo en solitario. Más tarde se le uniría Claudio Chiappucci y juntos entraron a meta. Indurain quedó segundo en la etapa haciendo un corte de mangas dedicado a la prensa francesa, que le había tachado días antes de ser un corredor conservador.

Como último apunte de aquel tour quería destacar el hostiazo que se pegó Djamolidine Abdoujaparov en el sprint de la última etapa. Tuvieron que ayudarle a cruzar la meta y así conservar el maillot verde.

En el 1:28 vemos el colofón final de tour para Abdoujaparov

TOUR 1992
Para mi el tour del 92 fue el que Indurain ganó con mayor autoridad. No se lo pusieron fácil pero Miguel llegó en un momento de forma extraordinario. Hay dos momentos que marcaron aquel tour:
La crono de luxemburgo, la primera crono del tour. Aquel día Indurain realizó los 65 kilómetros a una media de 49km/h una auténtica proeza que le bastó para sentenciar el tour. Alcanzó hasta a tres corredores que habían salido por delante de él y en la llegada a meta ya tenía casi cinco minutos de ventaja sobre Chiappucci, Bugno y Lemond. De otro planeta.

El otro momento memorable fue la etapa que finalizaba en Sestrieres. Era el primer día de alta montaña del tour y tras la carnicería realizada por Indurain en la contrareloj, Claudio Chiappucci no se resignó a dar el tour por perdido, así que en una etapa de 250km el italiano cogió una fuga a 200km de meta y comenzó a recortar minutos sobre Indurain. Viendo que las fuerzas le acompañaban, a 125 km de meta Claudio abandonó el grupo de escapados y marchó en solitario hacia el final de etapa. Toda una locura que nadie se plantearía, un sólo corredor echando un pulso al pelotón en una etapa de montaña ¿Aguantaría o reventaría?
No sólo aguantó sino que en el último puerto cuando parecía que Indurain le cazaría terminó sacando de punto al navarro y en la llegada a meta le aventajó en casi dos minutos.
Una etapa increíble, casi ocho horas sobre la bicicleta sin tregua. Sin duda una de las mejores etapas de la historia del tour.


'cuando llegué al Tour de 1992 llevaba tres años pensando cómo ganar la ronda francesa. Estando Indurain me di cuenta que podía pasarme tres años pensando lo mismo' Claudio Chiappucci.


TOUR 1993
Para 1993 cambiaron los rivales de nuestro navarro favorito. Esta vez Miguelón venía de ganar su segundo giro de italia y un futuro halagüeño se presentaba en la cita de julio. Su nuevo gran rival era el suizo Tony Rominger y precisamente uno de los momentos inolvidables de aquel año lo protagonizaron en el Tourmalet.

En aquella etapa Rominger se escapó ascendiendo al mítico puerto y nadie fue capaz de seguirle. Indurain y el Banesto (su equipo) no se volvieron locos, marcaron un ritmo exigente durante la subida y al coronar Rominger aventajaba en mas de un minuto al grupo de favoritos. Indurain, seguramente recordando la primera vez que se vistió de amarillo en ese mismo lugar, volvió a atacar en el descenso de aquel puerto y abandonó el pelotón. En pocos kilómetros y de manera sorprendente Indurain apareció como una sombra tras el suizo. Ese fue el mazazo moral que hizo saber al resto de competidores que la lucha por el primer puesto estaba bastante definida.

Curiosamente de aquel año salió como tercero un polaco, Zenon Jaskula. La lucha por el último puesto del cajón estuvo protagonizada por un par de corredores que nunca más hicieron nada destacable. Zenon Jaskula y Álvaro Mejía.
Yo iba con Zenon Jaskula porque de pequeño tuve una época de vicio al matamarcianos Xenon que nada que ver con el corredor pero gracias a esto le cogí cariño. Comentar que Mejía ahora mismo es doctor, un curioso cambio de profesión.

TOUR 1994
En el año 94 la gente empezaba a soñar con un Indurain que igualaba la gesta de Anquetil, Mercx e Hinault de ganar cinco tours, faltaban dos pero Miguel seguía siendo el gran favorito.
La verdad es que este tour nos dejó un sabor de boca extraño; Indurain ganó con bastante ventaja pero venía de perder un giro y en la última semana de carrera se desinfló bastante y perdió tiempo en casi todas las etapas de montaña.
Aquel año Miguelón tuvo la suerte de sentenciar en la primera semana, con una crono en la que una vez más machacó a sus rivales (curioso el video de la pasada a Lance Armstrong) y un par de etapas en las que cada gran rival perdió demasiado tiempo.
La sorpresa la protagonizó el letón de la Gewiss Piotr Ugrumov, que en las últimas etapas de montaña empezó a recortar minutos sobre sus rivales de una manera increíble. Todo esto y ganar la última contrareloj, concretamente una cronoescalada le valió para subirse al segundo cajón del podio.


¡Olé!

TOUR 1995
Llegaba el año 95 y la oportunidad única de conseguir la hazaña que sólo tres personas habían conseguido anteriormente. Todo el mundo estaba espectante ante el gigante navarro. El lo sabía y no pudo esperar a decidir el tour en la montaña, lo hizo en una de las primeras etapas que tenía muchas pequeñas cotas de tercera y cuarta categoría y que viendo el perfil parecía un serrucho. A mitad de la etapa se escapó junto a Johan Bruynel (sí, el exdirector de US Postal y una de las personas más influyentes del ciclismo actual) y le llevó en volandas hacia la meta. Lógicamente Bruynel no colaboró con Indurain, el corría para la ONCE y debía trabajar para Alex Zulle. Así que Johan se llevó la etapa al sprint y Miguel dio un golpe de autoridad en una etapa que nadie se lo esperaba.



En la primera gran etapa de montaña fue el suizo Alex Zulle quién atacó, posicionándose como gran rival de Indurain y entrando a meta en La Plagne con dos minutos sobre el navarro. La emoción estaba servida pero le llevaba suficiente ventaja como para preocuparse tan sólo de seguirle en la montaña y destrozarle en las contrarelojes.
La undécima etapa cayó en 14 de julio, fiesta nacional francesa, y lo celebraron por todo lo alto. Laurent Jalabert se escapó junto a un par de compañeros de la ONCE y llegaron a aventajar al pelotón en 14 minutos, lo cual ponía al francés como lider virtual. El Banesto reaccionó y aunque ganó Jalabert, este entró a meta con cinco minutos de ventaja sobre los favoritos.
De aquí hasta el final no hubo ningún ataque que pusiera en jaque a Miguelón. Indurain entraba en la historia.


FORMA DE CORRER
A Indurain se le recuerda por ser un ciclista generoso en las victorias. Normalmente siempre entraba acompañado a meta y no disputaba los sprints, prefería regalar la victoria de etapa y mantener el amarillo. De hecho es curioso que en los cinco tours que ganó, no consiguiera ninguna victoria de etapa fuera de las contrarelojes. Y es que la táctica de Miguel era esa, machacar a sus rivales en las cronos sacando más de dos minutos a todos sus rivales y seguir el ritmo de los mejores en la montaña.
Curiosamente cuando alguien lanzaba un ataque no solía responder al instante, simplemente se sentaba en la bici, incrementaba el ritmo e iba asfixiando a sus rivales hasta que daba caza al fugado.
También es importante mencionar que el Banesto, su equipo durante los cinco años, nunca fue un gran bloque. De hecho nunca tuvo un fiel escudero que le ayudara en sus peores momentos. Había otros equipos mucho mejor estructurados y con mejores posibilidades que le hacían frente pero claro, el ciclismo es un deporte individual y por mucho que te ayuden si tu rival es más fuerte poco puedes hacer.
También se le recuerda mucho su seriedad al correr, Indurain era un tipo tímido y a la hora de estar en carrera su cara no delataba esfuerzo, ni alegría, ni cansancio con lo que sus rivales no sabían si realmente estaban forzando a Indurain o si estaba de paseo junto a ellos.

Lo dicho, un crack. Muchos dirán que se dopaba o que Armstrong era mejor que él. Puede ser, no os voy a engañar, pero lo que seguro que no encontraréis es alguna queja de cualquier rival sobre él.

Fabian Cancellara, el auténtico reloj suizo.

Cuando voy a andar en bici hay dos cosas que me gustan sobremanera:

La primera es subir montañas con una buena cadencia. Pocas cosas motivan más que ver que estás avanzando y haciendo las cosas bien mientras miras el precioso paisaje que suele acompañar a las carreteras que tiran hacia arriba. Normalmente esos momentos son bastante íntimos. Acompañado o no la gente suele ir en silencio, concentrada en lo que hace mientras el ruido del monte te relaja y te lleva hacia la cima.

El segundo momento que me encanta es cuando vas por llano y descubres que en realidad la carretera pica hacia abajo. Coges inercia, subes plato y en cuanto te descuidas te das cuenta que sigues pedaleando y vas bastante rápido. Algo radicalmente opuesto a lo primero pero que os aseguro también tiene su encanto.

Y en esto último, en ir por llano y rodar a tope, es en lo que destaca uno de mis ciclistas favoritos: Fabian Cancellara.


La verdad es que descubrí que conocía a Cancellara hará unos cuatro años, gracias a una errata en el dvd de sobremesa que tengo por casa. En las opciones al darle 'Aceptar' o 'Cancelar' en realidad pone 'Aceptar' o 'Cancelera' y el primer día que lo leí me dije 'Cancellara!' desde ese momento es de los que animo en toda contrarreloj, clásica o mundial. Y no defrauda.

Como todos los ciclo aficionados deberíamos saber la especialidad del expreso de Berna son las contrarrelojes aunque no por ello debemos olvidar que en las clásicas es un auténtico campeón.

Lo que más me gusta de Fabian es su manera de correr, pase lo que pase no se levanta. Si le toca tirar del pelotón avanza sentado hasta que sus piernas le hagan parar y cuando te quieres dar cuenta el grupo se ha reducido en bastantes unidades. En el tour de 2008, tras pasar la Croix de Fer le tocó marcar ritmo en el pelotón. Cancellara se puso en cabeza y pedaleó 'a su ritmo', tranquilamente, y cuando se dejó caer del pelotón pudo comprobar que los pocos que quedaban iban asfixiados. Al día siguiente Alejandro Valverde en tono amistoso le confesó que le estaba reventando con el ritmo que impuso.

Sin duda la gesta que para mi mejor le retrata es la que hizo en las olimpiadas de Pekín.
La mayoría de nosotros recordaremos aquellas olimpiadas por el oro de Samuel Sanchez en ruta pero personalmente lo que sin duda me marcó fue el bronce de Espartaco Cancellara.
A falta de pocos kilómetros se había producido el corte bueno. En el pelotón nadie se decidía a intentar cazar a los escapados porque todas las grandes selecciones habían colocado un corredor en el grupo de cabeza. Todas las selecciones salvo Cancellara, que no tenía ningún compañero de equipo. Se apuntó el sólo para representar a suiza y no podía pedirle ayuda a nadie.
En un arranque de rabia y frustración saltó en solitario del pelotón arrastrando consigo a dos corredores. En ningún momento les pidió ningún favor ni relevos. Siguió pedaleando hacia el horizonte esperando conectar con los fugados y a falta de pocos metros llegó al grupo de los buenos. No contento con haber protagonizado un momento memorable se quedó a la cola del grupo descansando un poco y preparando el sprint. Y cuando llegó el momento no esprintó, siquiera se levantó de la bici, simplemente incrementó el ritmo y consiguió hacer un tercer puesto que para mi era el auténtico oro.



Podría seguir narrando hazañas de Espartaco como la Paris-Roubaix 2010 donde ganó tras rodar más de 45km en solitario sin que nadie le pudiera dar caza, o los cuatro títulos mundiales contrarreloj o la cantidad de veces que le habremos visto como campeón suizo pero sería caer en la repetición y hacer el post innecesariamente largo.
Simplemente espero y deseo que sea alguna vez campeón mundial en ruta. Es el mejor pero por desgracia nadie le acompaña en la selección suiza así que tendrá que hacerlo como casi siempre; en solitario.


El caso Festina


Hace unos meses hablé sobre Tom Simpson, el hombre que falleció sobre su bicicleta a causa de las anfetaminas que se tomó para mejorar su rendimiento. Y de eso quería hablar, del segundo gran capítulo acerca del dopaje en el ciclismo; el caso Festina.

Nos situamos en verano de 1998 con el tour dispuesto a comenzar en tierras irlandesas. En las aduanas del país se produce un chivatazo en el que arrestan al masajista del Festina por importar medicinas sin autorización. En el revuelo nadie sabía muy bien lo que estaba pasando y la carrera siguió adelante. Días después nos enteramos que las 'medicinas' no eran otra cosa que EPO, hormonas de crecimiento y testosterona.

El 17 de julio la organización decide expulsar al equipo Festina. Aquel equipo no era uno más, venían a ganar el tour:
Richard Virenque, Alex Zulle, Laurent Brochard, Pascal Hervé, Christophe Moureau, Didier Rous, Laurent Dufaux, Armin Meier y el australiano Neil Stephens.
Viendo los componentes os diré que salvo Armin Meier me suenan todos y me da pena pensar en lo que pasó aquel año porque habría sido un tour muy entretenido de haber estado en la pomada este equipazo compitiendo con normalidad.

Richard Virenque abandonando el tour. El dopaje hizo mella en su pelo.

Una vez que se tira de la manta la policía francesa comienza con los registros al resto de los equipos; controles antidopaje, detenciones y la visita de 'los vampiros' a horas intempestivas. Hasta entonces si que había controles antidopaje pero desde luego no eran tan frecuentes ni exhaustivos como lo son ahora.

Como protesta por el mal trato y la presunción de culpabilidad de todos los corredores, dos son los ciclistas que deciden representar al pelotón y defender la inocencia de sus compañeros: El carismático y superclase corredor francés Laurent Jalabert y el excampeón danés y gran hijodeputa mentiroso Bjarne Riis, quien le ha visto y quien le ve.

Pantani con el resto del pelotón negándose a correr.

Tras un tour lleno de parones, etapas a ritmo de pachanga, días en los que no llevaba nadie los dorsales y demás desplantes y peleas entre la organización y los corredores, cruzan la meta de parís 96 de los 189 que comenzaron el tour.


Valreas - Grenoble 1998. Vencedor: Piraña

Entre los equipos españoles hubo un pacto para abandonar el tour como protesta hacia el trato de la organización. Recuerdo como el Marca titulaba en portada con orgullo aquello de 'ningún español acaba el tour' y al director Manolo Saiz vanagloriarse de haber estropeado entre todos el tour alegando que le habían metido un dedo en el culo a la organización.

Ahora la actualidad es bien diferente, si hay un país sospechoso de dopaje ese es españa. Recientemente hemos tenido dos casos que han salpicado nuestra actualidad y nos han sonrojado a los ojos del mundo: el caso galgo y el clembuterol de Contador.
Lo que más me fastidia es el trato por parte de la prensa y las excusas que parecen no llevar a ninguna parte.
En el caso de Contador primero era el filete que se comió un día en mitad del tour, luego los ganaderos dijeron que de qué va limpiando su marrón echándoles mierda encima.
Lo cierto es que a día de hoy no se sabe bien qué es lo que ha sido pero Alberto ya está con la sombra de la sospecha y la UCI tomando a españa como un país poco serio en lo que respecta a la lucha antidopaje.
Algunos pensarán que deben hacerse más controles todavía, yo creo que es cuestión de la educación que recibe cada uno en su casa.

Mundial de ciclismo en ruta Melbourne 2010.

Muchas fueron las críticas cuando a la pregunta de si salía este sábado mi respuesta era la de 'No, es que quiero ver el mundial de ciclismo'. Recordemos que la carrera empezaba a retransmitirse a las 4:30.
Lo del madrugón era una putada pero el asunto no era baladí; un posible cuarto título del capitán Oscar Freire Gómez es algo que no se puede dejar pasar. Así que con el despertador a las 5:30 me levanté como un imbecil a ver la tele. Y ha merecido la pena.

Creo que ha sido uno de los mundiales más entretenidos que recuerdo, a pesar de que en todo momento el equipo español ha nadado a contracorriente.
Nada más poner la tele las noticias no eran nada buenas, un grupo de unos treinta corredores entre los que estaban tres australianos incluido Cadel Evans, dos alemanes con André Greipel, cinco italianos con Vincenzo Nibali, tres belgas, un par de holandeses, el irlandés Nicola Roche y tres españoles Rubén Plaza, Haimar Zubeldia y Carlos Barredo entre otros sacaban un par de minutos al pelotón principal y el entendimiento entre ellos era bueno.
Aquellos representantes de la selección no nos servian; de haber estado Freire, Samu Sanchez o Luisle otro gallo habría cantado pero por desgracia estos no acumulaban demasiadas papeletas para el triunfo final. Tocó tirar para anular la escapada junto al equipo ruso.

Que fueron españa y rusia los que anularon la escapada es algo que imaginamos porque la realización australiana se ha lucido. No se si ha sido un exceso de patriotismo o que al realizador ni le gusta ni le interesa el ciclismo porque lo que han montado ha sido lamentable. En todo momento enfocando al grupo de cabeza, planos cortos de Cadel Evans, helicóptero enseñando la ciudad y del resto de corredores ninguna noticia. Ni siquiera nos mostraron las cámaras fijas en muchos pasos de meta, nos nutríamos de unos tristes rótulos a cada paso por meta para imaginar lo que sucedía atrás.

Quería destacar la actuación de Haimar Zubeldia, que tras ocho años sin pisar la selección volvía hoy. No tenía muchas esperanzas con él pero ha estado sobresaliente, se ha colado en la escapada protagonista y ha sido el segundo español en entrar a meta en el puesto 39. Lo dicho, una agradable sorpresa, ¡Goazen Haimar!

Zubeldia ganando algo con el RadioShack. Yes we can.

Gracias a un ataque sin mucho sentido de Vincenzo Nibali a pocas vueltas del final se ha podido anular aquel grupo de favoritos. Ha saltado en una de las ascensiones partiendo el grupo en dos, consiguiendo así que entre los italianos no tirase nadie, los holandeses tampoco y el resto de equipos se desentendieran de la carrera. A partir de ahí se reducían las distancias y conseguían que me levantara entusiasmado a por mi botellín del Rabobank para hacer el subnormal animando a Oscar Freire. La esperanza crecía y mi padre venía al cuarto con espuma de afeitar en la cara a ver el final de carrera.

En el paso por meta de la última vuelta el grupo estaba prácticamente neutralizado y la sorpresa ha sido ver a otro de mis favoritos, Fabian Cancellara en solitario con medio minuto de retraso. Supongo que habrá pinchado y eso le habrá dejado sin opciones porque no es normal que dejen al suizo en llano. Pero eso nunca lo sabremos gracias a la realización australiana que estaría ocupada mostrando a O'Grady en mitad del pelotón.

En la última vuelta el belga Philippe Gilbert saltó nada más reagruparse el pelotón, después saltó Evans con otros tres corredores y tras el paso por el primer repecho Freire acumulaba un retraso de más de medio minuto. Apenas duró nada la alegría de ver el pelotón reagrupado.

A dos kilómetros del final nos volvimos a alegrar cuando por sorpresa unos quince corredores neutralizaban a los escapados, entre ellos Freire. Digo que por sorpresa porque no supimos nada de lo que sucedía atrás gracias a la tv aussie.
A pesar de todo, el campeonato se decidió al sprint entre un grupo muy reducido, Freire sólo pudo ser sexto y el vencedor fue Thor Hushovd. Freire explicó más tarde que el desgaste por coger al grupo de treinta rompió a la selección y al final le pasó factura a él.

La verdad es que me alegro por Hushovd, un veterano con un gran palmarés que siempre se le ha visto en las grandes vueltas y que nunca ha tenido equipo para ayudarle a conseguir el mundial. Cuando gana alguien así es inevitable alegrarse por el.
Uno de los ratos más graciosos que nos ha dejado la celebración ha sido el momento del podio cuando se han subido y no sonaba el himno noruego, en ese momento Perico comentó que 'tendrían preparado el australiano' y en cuanto sonó a los pocos segundos lo cortaron. Thor se quedó con una sonrisa bobalicona mirando a cámara y a sus compañeros del podio.


9º el japonés Arashiro, de haber sacado medalla habría sido el notición.



Otra de las curiosidades que también quería destacar ha sido lo del equipo de los hermanos Schleck. Delgado nos ha contado una conversación que tuvo con Carlos Barredo hablando sobre el nacimiento de este equipo.
Al parecer todos sabemos que los hermanos Schleck van a hacer un equipo luxemburgués pero nadie sabe cómo se llamará ni qué sponsor tendrá. Por lo visto la idea nace de un millonario de luxemburgo que se quiere meter a la política. Para darse a conocer necesita la imagen de algún luxemburgués internacional y que yo sepa no hay nadie más conocido internacionalmente que los Schleck así que los ha fichado y ha fichado al resto de corredores. Por lo visto está todo preparado pero no tiene nadie que lo patrocine así que mientras siga esta situación el equipo será algo fantasma que queda en el aire como si de un Duke Nukem Forever se tratara.

Y esto en resumidas cuentas ha sido lo que ha dado de si el mundial, una lástima que sólo se corra una carrera de este tipo una vez al año. Una carrera larga y sin pinganillos, que se decide por la resistencia y la inteligencia de cada uno. Personalmente me encanta y me parece un oasis en un ciclismo cada vez más aburrido y denostado por el dopaje.

Hushovd ganador, segundo Matti Breschel (DIN) y tercero Allan Davis (AUS)

Tom Simpson, el hombre que revolucionó el dopaje.

Año 1967, julio. Los favoritos afrontan la subida a la cima de los vientos (mont ventoux).
En mitad de la ascensión uno de los favoritos, el británico Tom Simpson intenta el demarraje sin éxito y a los pocos metros es superado por el grupo de favoritos.
Cae al suelo pero rápidamente se levanta. 'Put me back on my bike!' El público lo devuelve a la verticalidad y poco después vuelve a caer.

De esta no se levanta; fallece creando un escándalo que revoluciona el ciclismo hasta nuestros días.

Aunque su cerebro le decía que continuara sus piernas no podían más.

Sin duda una muerte trágica en el ciclismo, otra más, pero esta vez de la mano de un hombre que quizá en su destino no le correspondía ser ciclista a pesar de que su carrera fue prolífica:
Como corredor era un clasicómano, consiguió varios triunfos de etapa en la vuelta a españa, el tour de Flandes, la Milán-San Remo y sobre todo el campeonato del mundo de ciclismo en ruta en 1965.


Pero como he dicho antes quizá esta persona no merecía ser ciclista, en principio se metió a ello para librarse del Servicio Nacional y viendo la manera en que se dopaba demostró poco amor a este deporte.

Días antes de su fallecimiento Tom había tenido problemas estomacales y estaba muy retrasado en la general. Teniendo el cuerpo debilitado y con las condiciones extremas de esfuerzo y calor que llevaba la carrera Simpson no estaba en situación de exigirle mucho a su cuerpo, sin embargo decidió abusar de anfetaminas y un poquito de brandy para compensar sus problemas. Aquella mezcla le causó una deshidratación que lo llevó a la tumba, y es que mezclar anfetas y alcohol da sed ¿Por qué creéis que los bakalas suelen llevar un botellín de agua o un Bio Frutas en la discoteca? ¿Vida sana? Los cojones.

Advierto que da un poco de yuyu ver este vídeo, una muerte agonizante en directo no mola nada.

Leyendo esto en pleno 2010 me quedo ojiplático, no sólo tomaba anfetaminas, era tan descarado que llevaba tres botes en el maillot para ir comiendo mientras corría y cuando murió tenía uno vacío. Pero claro, si echo la vista atrás recuerdo el maletero de la mujer de Raimondas Rumsas lleno de jeringuillas y pienso que la idiotez de los malos tramposos ni ha cambiado tanto ni cambiará.

Al menos su muerte sirvió para empezar a oficializar los controles antidopaje, se comenzó a establecer normas para decidir qué era legal y qué no. Pero como he dicho más de una vez; a día de hoy quien más quien menos estoy convencido de que todos toman algo, al menos los favoritos.

Es significativo que en un capítulo de House su paciente es un ciclista profesional y en vez de buscar que ha podido tomar que le haya hecho enfermar buscan que NO ha tomado porque dan por hecho que los ciclistas se meten de todo.

En fin, citando de nuevo al doctor House 'todo el mundo miente' especialmente aquellos ciclistas que aprovechan cualquier ocasión para proclamar su inocencia sin haber sido acusados de nada.

Videojuegos: Perico Delgado maillot amarillo.

Hace unos días un cliente me trajo a la tienda un ordenador averiado con el videojuego Pro Ciclying Manager para instalar. Aquel detalle no me hizo sino gracia, y curioso que es uno miró la contraportada del dvd, donde aparecían las imágenes del juego. Una de ellas me llamó la atención por encima del resto y sin embargo no mostraba nada del juego; era la cara del comentarista de tve Carlos de Andrés, que también ponía los comentarios a este juego.
Para que la simulación de una etapa de ciclismo fuera completa faltaba Perico Delgado aportando comentarios técnicos y chistes malos.

¿Cuál es el pez más bonito? El sal-monete

Todo esto me hizo recordar que Pedro Delgado ya tuvo su propio juego de su etapa como corredor, el Perico Delgado maillot amarillo.


El videojuego no salió ayer precisamente, fue lanzado en 1989 por la desarrolladora española Topo Soft.
Aquel juego se caracterizaba por su variedad. Tenía cuatro fases, que aunque parecidas en todas ellas debías hacer algo diferente.

En la primera debías pedalear adelantando a los pequeños grupos que se iban quedando del pelotón, había que andarse con ojo de no cebarse en la pedalada porque sino Perico desfallecía y perdía muchas posiciones. Parecía como aquellos pinchazos inoportunos en las que un favorito tiene que parar al principio de un puerto y según se incorpora al grupo de cabeza va haciendo una rápida pasada por los grupos de corredores que minutos antes dejó atrás.


La segunda fase es una cronoescalada en la que tienes que ir jugando con los cambios y tratar de recuperar fuerzas en los descansillos de mitad de puerto, con el segoviano como principal protagonista y un buen acabado gráfico.

Y tiene que ser cronoescalada porque para algo nuestro Perico era escalador.

La tercera era un descenso en el que el peligro radicaba en salirnos de la carretera, chocarnos con otros compañeros de pelotón y coger el avituallamiento para evitar los pajarones. Jugablemente parecía bastante incómodo, pero poco más se le podía exigir a un videojuego de 1989.

La cuarta y última fase era una etapa llana, una especie de homenaje al pelotón en la que el objetivo era el de esquivar las motos de la televisión (Iñaki Cano jodiendo la marrana con sus entrevistas en mitad de carrera) y ganar el sprint final.


El juego era corto pero variado, si tenemos en cuenta la época en que apareció es merecedor de un sobresaliente.
Fuera del juego lo que más me sorprende es que en las maratonianas retransmisiones que se hacen Delgado y de Andrés nunca hablan de este juego ni del Pro Cilcying Manager, tampoco les pregunta nadie por el facebook nada acerca de los videojuegos que protagonizan. Yo pienso en esto y se me vienen muchísimas preguntas a la cabeza: ¿Guardarán por casa sus videojuegos? ¿Jugarán de cuando en cuando? ¿Les gustarán? ¿Les traerá de cuando en cuando algún espectador el Perico Delgado para que se lo firme el propio Pedro?
En fin, misterios de la humanidad que seguramente no tengan respuesta.

Lamentablemente nunca tuve el juego de nuestro segoviano favorito. En aquel momento era muy pequeño y mis padres nunca me lo compraron. Recuerdo observar las imágenes en la micromanía y verlo en el Corte Inglés de bilbao pero no catarlo jamás.

Y es que para mí el ciclismo comenzó con don Pedro Delgado Robledo, sobremesas reunidos en la sala viendo a Pedro ganar la vuelta a españa, recortar las fotos del equipo ciclista Reynolds que venían en el cartón del papel albal de la misma marca y jugar con esos recortes imaginando carreras en las que ganaba Perico.

Quizá por cosas como estas sea por las que tenga un cariño especial al ciclismo y a Pedro Delgado en particular. Mas allá de sus logros deportivos, Pedro iluminó mi infancia fuera de las carreras, me trajo momentos de diversión y consiguió que en casa hubiera un deporte que nos gustara a todos (en el resto de deportes no coincido con mis padres). Ahora está como comentarista y me sigue pareciendo el mejor. ¿Os imaginais una retransmisión sin Delgado? ¿Quién nos despertaría de la siesta con un chiste?

Alexandre Vinokourov, el último guerrero.

Sin duda alguna lo primero que me llamó la atención de este ciclista no fue su calidad, ni alguna hazaña que pudo protagonizar; en lo primero que me fijé fue en su nacionalidad. Un kazajo en el grupo de elegidos no es lo habitual. Es inevitable no centrar la atención en un tipo de un país cuanto menos raro. Igual que te fijas en Vinokourov en su día te fijabas en Piotr Ugrumov (letón) o en Djamolidine Abdoujaparov (uzbeco).

Y falta la de este año en Revel!

Por suerte Vinokourov se ha ganado el carisma gracias a otras facultades y a mi personalmente me encanta. Me parece un ciclista excepcional, de los que ya no quedan, de ahí que le quiera rendir este pequeño homenaje.

Ante todo Alexandre Vinokourov es un ciclista al que quizá le falte cerebro y le sobre valor. Precisamente eso es lo que le hace diferente al resto de corredores de este ciclismo ultraconservador que estamos sufriendo en esta década.
Cuando los directores de las grandes escuadras planean la estrategia de ir toda la etapa a un ritmo asfixiante para evitar que en el último puerto siquiera queden fuerzas para ir a la cola del grupo a por bidones, Vinokourov aprovecha cualquier momento de descuido para saltar de una manera descerebrada y carente de toda lógica del pelotón. Ya puede ser en un complicadísimo descenso, como a 80 km de meta con dos puertos de primera entre medias, a 'Vino' no le importa el mañana y si hay que saltar se salta con todo lo que se tenga, sin guardarse nada, con el orgullo de saber que por detrás está reventando la carrera y creando dudas entre los máximos favoritos.

Vinokourov y el atlético, capaces de lo mejor y lo peor.

Es una pena que ya no se vea este tipo de ciclismo porque en mi infancia aquellos héroes que conocí se hacían etapas de montaña (de auténtica montaña con tres puertos de primera y dos de especial) y se escapaban a mitad de etapa. Vale que antes los ciclistas fueran puestos hasta las cejas de EPO, pero el espectáculo que proporcionaban al público era algo genial y eso se ha perdido.
Desconozco si esto se podrá medir pero estoy seguro que ahora hay mucha menos afición al ciclismo que en los 90, y no era don Miguel Indurain y sus triunfos el que nos enganchaba a la televisión, porque si fuera por ciclistas españoles a los que seguir ahora tenemos muchos más y también ganadores. Lo que antes nos enganchaba al ciclismo era venir de la playa, poner la 2 y ver que a 70 km de meta había saltado el cuarto de la general y era líder virtual.
Eso amigos míos era la polla con cebolla.

Por desgracia para Vinokourov en 2007 dio positivo en un control antidoping. Recibió la sanción de dos años sin correr y este año ha vuelto haciendo giro y tour. Fue una desgracia para él pero me atrevería a decir, y esto es muy discutible, que fue una desgracia para el ciclismo que el corredor más valiente y el que creaba más afición apareciese como un tramposo.

Personalmente me da igual que los ciclistas se dopen. Estoy seguro de que quien mas quien menos todos toman algo para mejorar su rendimiento y si esa mejora termina dando más espectáculo ¿por qué no hacer menos estrictos esos controles y hacer que los corredores puedan tomar sustancias de manera controlada?
Es que saldríamos todos ganando; los aficionados veríamos un espectáculo mucho mejor, los corredores no tendrían que dar parte a la UCI de todo lo que hacen ni recibirían la visita de los vampiros.

Ahora que se acerca la retirada de Vino del ciclismo profesional siento un poco de lástima al ver que su espíritu combativo perdura pero las piernas le dicen que ya no es el que era. Ha conseguido varias victorias épicas y ha ganado una vuelta a españa pero sin duda entre su prolífico curriculum yo me quedo con la victoria en Paris de 2005:
Última etapa del tour, Alexandre salta del pelotón a unos 2 kilómetros de meta y mantiene con el pelotón un pulso de unos cinco segundos llegando hasta la meta con fuerzas suficientes para esprintar.
No es una victoria en una de montaña, ni un descenso suicida pero es la mezcla de rabia, fuerza y valor lo que le hace conseguir una victoria en un terreno en el que nadie se plantea el intentarlo.

La victoria de ese día no te la hace nadie, a lo sumo Cancelara. Pero este estoy seguro que no salta.

Una pena que se le haya pasado el arroz, sin duda es el último guerrero del pelotón.

La vida Cipollini, la vida mejor.

Hace un tiempo oí decir a un cantante aquello de 'cada vez creo menos en el talento y más en el trabajo duro'. Seguramente a Rock Lee se le saltaría alguna lágrima al escuchar tal afirmación, pero en putofutbol gustan más los deportistas que se basan en el talento, la genialidad y que de cuando en cuando nos regalan alguna excentricidad que casi parece más destinada a humillar a sus rivales que a ganar algún trofeo.
Si alguien puede decir que la vida está para divertirse y que el trabajo duro es para los perdedores ese sin duda es Mario Cipollini.

LA VIDA SEGÚN CIPOLLINI

Si se le pudiera aplicar una regla de oro a la vida de Mario, esa sería la de 'el esfuerzo corto pero intenso' porque es exactamente lo que hacía en cada una de las carreras en las que participaba.
No digo esto porque fuera uno de los mejores sprinters y puede parecer que su trabajo se basa en unos segundos dentro de cientos de kilómetros; digo esto porque sus esfuerzos en las grandes vueltas se centraban en la primera semana de carrera, donde trataba de hacer el menor trabajo posible, ganar un par de etapas, correr la primera contrareloj larga como líder y retirarse en la primera etapa de montaña.
El maillot de la regularidad pa' tu culo pirulo, que eso son tres semanas de trabajo.

La preparación de Super Mario para las grandes vueltas tampoco se puede decir que fuera concienzuda; básicamente se trataba de mantener la punta de velocidad, algo que por otra parte se pierde muy poco a poco con la edad, y fichar a un equipo con los mejores esprinters para servirle en bandeja el triunfo a Cipollini. Tanto es así que en algunas etapas se podía ver a tres o cuatro corredores del Saeco lanzando el sprint prácticamente sólos y apartándose a última hora para que nuestro protagonista quedara primero.
La mirada de Mario se ocultaba tras las gafas pero todos sabemos que esa mirada en realidad decía 'Que fácil es vivir!'

Alguna vez subió al podio de traje, nada de sponsors ni patrocinadores. Rey de reyes.

LA FANTASIA DE MARIO

Pero sin duda donde Cipollini se daba un festín era en los prólogos. Si esta no era su especialidad, ¿Por qué destacaba?
Pues porque ahí es donde sacaba a pasear todo su sentido del humor y salía disfrazado con trajes de lo mas esperpéntico a contrarelojear. Ya podía ser con un traje de tigre, con la bandera de los estados unidos, disfrazado de Tron, con un traje de cebra, con un maillot que simulaba la musculatura humana, si estaba de líder en el tour completamente de amarillo e incluso jamonas en el manillar de su bicicleta para servirle de inspiración en la soledad de la carretera.

Lo mires como lo mires Mario es el puto amo

Claro que todas estas adorables payasadas hacían enfadar a los más puristas. En mi opinión esta era una forma magnífica de dar espectáculo en un deporte que muchos tachan de aburrido, pero como aquí los que mandan son los de la Unión Ciclista Internacional y no yo, por cada uno de estos trajes le caía una buena multa a Cipollini. Algo que le daba igual, supongo que para el era algo así como invertir en publicidad.

El día que según Jean Marie Leblanc (el manda más del tour) se pasó de la raya fue cuando se disfrazó de Ave Cesar y todo su equipo le acompañó disfrazado de romano. Fue en el día de descanso del tour del 2000. Con su broma quería celebrar el aniversario de Julio Cesar y su record de cuatro etapas consecutivas en un tour pero tras esto fue vetada su participación desde el 2000 hasta el 2003.
¿Y cómo es que le levantaron la sanción en 2003?
Pues muy fácil. Cuando te riges por hacer lo que te de la gana normalmente te ganas diversos castigos. Si eres un cenizo poco a poco vas pasando por el aro y descubres que en la vida tienes que seguir unas normas si no quieres tener problemas, si eres un puto genio no te importan los castigos y consigues que se te perdone demostrando que eres el mejor. Eso es precisamente lo que hizo Mario. En 2003 fue campeón del mundo de fondo en carretera y añadió ese punto de presión a la organización para que lo volviesen a admitir. Un tour sin el campeón del mundo no es lo mismo.
Lo volvieron a admitir y brilló pero en lo que respecta a su comportamiento no se redimió.

Ese mismo año su equipo participó en la vuelta a españa. La única condición que se les puso es que Cipollini estuviera presente ya que salvo él, el resto del equipo era una escuadra de desconocidos que apenas aportaban notoriedad en el pelotón.
Mario participó, corrió el prólogo (unos 10-15 km) y se retiró, dejando a toda la organización con el culo torcido. Le cayeron bastantes críticas por su comportamiento y él se defendió alegando que se estaba recuperando de una lesión. Yo tampoco me lo creo pero aun así me sigue pareciendo genial.

House y Mario, Mario y House. Tanto monta, monta tanto.

Y así ha ido pasando su vida. Mario es un personaje popular en italia, un playboy que ha reconocido que si no hubiera sido ciclista habría sido actor porno.
Podría poneros varios vídeos suyos con sus mejores victorias, la caída que sufrió en la vuelta de 1994, bailando en el mira quien baila italiano o incluso tirando una botella a una moto que le pasa demasiado cerca en una carrera pero prefiero poneros una broma de cámara oculta en un programa italiano. Miradlo porque os aseguro que no tiene desperdicio. Risas garantizadas:


¿Vuelta a la normalidad?

Se suele decir que no es recomendable mezclar política y deporte. Que es pisar un terreno peligroso en el cual posicionarse de un lado o del otro siempre trae problemas, independientemente de las ideas que cada uno muestre. Quizá por el miedo a que eso ocurra no hay muchos casos de deportistas que alcen su voz dando su opinión sino todo lo contrario, se dejan llevar en lo que sin duda es una posición respetable y probablemente inteligente. Sin embargo, con motivo de las últimas noticias relacionadas con la petición por parte del parlamento vasco a acoger etapas de la Vuelta Ciclista a España y partidos de la selección española de fútbol, es inevitable reflexionar sobre el asunto y pensar el porqué hace tanto tiempo que ambos acontecimientos no se dan cita en el País Vasco desde los años 1978 y 1967 respectivamente. Para no ser sospechoso de nada, aclararé que esto es tan solo mi punto de vista. Soy de Madrid, votante de izquierdas y gran aficionado de ambos deportes.

Lo primero que me resulta sorprendente es por supuesto el plano deportivo. ¿Alguien ha visto una carrera ciclista por la tele sin aficionados vascos en la carretera? Yo desde luego no. No creo que haya un lugar más aficionado (y entendidos) al ciclismo que el País Vasco. El Euskaltel es un equipo de los más longevos en el pelotón actual y por descontado que un final de etapa en Bilbao o San Sebastián con una victoria de un corredor local sería celebrada igual o más que la de Iban Mayo en Alpe d’Huez.


Si hablamos de fútbol, no se entiende la historia de la liga o la selección española sin la aportación de históricos como el Athletic y la Real. Pocas aficiones son tan elegantes con el buen juego del equipo o jugadores rivales como el de San Mamés. ¿De verdad que no habrá gente que le apetezca ver jugar a una de las mejores selecciones del mundo actualmente, con el aliciente de que hay jugadores como Iraola, Xabi Alonso o Llorente en ella?

Desde fuera parece que problema deportivo no existe… ¿y político? Mis dudas se centran en la tolerancia de aquellos que no están de acuerdo, el éxito de convocatoria y la seguridad. El caso de la tolerancia es cuanto menos controvertido. En la memoria está la sonora pitada al himno en la última final de Copa del Rey. Los mismos que pitaban eran los que después del partido lloraban de felicidad o de tristeza por no ganar dicho trofeo. De hecho, en Barcelona se disputará la final de la Copa Davis este año, y es probable que algún aficionado culé que estuvo en Mestalla, también esté en esa final. Entiendo que alguien que no se sienta español no quiera ver a la selección o la Vuelta, pero es tan sencillo como hacer el día de la etapa o del partido lo mismo que aquel que no es aficionado al futbol ni al ciclismo, es decir, ignorarlo. Es una cuestión de respeto al que sí está interesado. El presidente de Athletic ha declarado “no percibir un sentir por acoger a la Selección". Sin embargo, sí ha solicitado ser sede para la candidatura España-Portugal del mundial 2018, al igual que la Real y Anoeta.

Y por último el tema de la seguridad, seguramente el más espinoso. Quizá es ahí donde radica el mayor problema, pero supongo que si se piensa organizar algún tipo de evento de este tipo es porque existen garantías para ello.

Mi conclusión personal es que es una pena que algo tan normal como un evento deportivo de gran interés no pueda ser disfrutado en el País Vasco por aquellos que lo deseen. No creo que sea ninguna provocación de ningún tipo, siempre y cuando no sea utilizado como arma política por nadie. Al final es lo de siempre, deporte y política no mezclan bien.

Contrarrelojes fatídicas

Hoy quiero hablar de contrarrelojes y contrarrelojistas. Ese arte que tan duro es de aprender y tan estético queda sobre la bicicleta. Ver a un corredor perfectamente acoplado cortando el viento mientras trata de arañar segundos al cronómetro es algo que para muchos pasa desapercibido pero a mi me parece fascinante.

En estos tiempos que corren de un ciclismo tan milimetrado las contrarrelojes se han convertido en la única manera de sacar una verdadera ventaja y muchas veces hemos visto como grandes escaladores han dilapidado el esfuerzo que han hecho en tres semanas en la última crono. Veamos algunos ejemplos de malas contrarrelojes:

ALEX ZUELLE - PEDRO DELGADO VUELTA ESPAÑA 1994
Este es un caso en el que el infortunio no se cebó con un escalador, sino con un auténtico profesional contra el crono. Alex Zuelle, se plantaba en la última crono con ventaja sobre Delgado, Perico estaba obligado a ganarle si quería terminar la vuelta con un podio en su última temporada como profesional.
Todo estaba bastante desfavorable para un Perico al que le faltaba la fuerza de años anteriores ante un joven que ya despuntaba.
En el primer punto intermedio Delgado ya perdía diez segundos respecto a Zuelle, algo que entraba en el guión. Lo que no estaba en los cálculos de nadie fue el milagro que aconteció en los 33 kilómetros posteriores; Hasta cuatro veces tuvo que bajarse Zuelle de la bicicleta, bien sea por problemas con el cambio electrónico, rotura de cadena y reventón de ruedas. Se rumoreó que pudo haber amaño pero lo cierto es que en la llegada a meta Delgado aventajó en un minuto al suizo. Gracias a esto Pedro acabó tercero la vuelta retirándose por la puerta grande del ciclismo.
No vuelve a repetir esa hazaña Perico en la puta vida.

Les juro que Briatore no ha dado ninguna orden contra Zulle


MICHAEL RASMUSSEN TOUR 2005
El caso de Rasmussen es uno de los más radicales que se han presentado a la última contrarreloj de la ronda gala.
Camino de Saint-Étienne 'el pollo', como le apodaron sus suegros o el 'corredor psicológico' como lo apodaron otros sufrió uno de los mayores desfallecimientos en la crono que recuerdo. Llegaba a ese día como tercero en la clasificación general. Estando a mitad de carrera y viendo que los tiempos que le llegaban desde el coche de carrera le eran desfavorables comenzó un festival de caídas, malas frenadas en las curvas, cambios de bicicleta y demás pijotadas que le hicieron perder no sólo la tercera posición, sino también la cuarta, la quinta y la sexta, terminando la ronda gala séptimo. Acabó la etapa con 7'47" de desventaja respecto al ganador, puesto 77 y cuatro parones en el recorrido.
Al día siguiente en los campos Elíseos se dejó caer del pelotón durante un tramo, según dijo el para reflexionar sobre lo ocurrido.
Michael Rasmussen, un tipo loco tirando a psicópata.


Tampoco se daba mucha prisa en cambiar.

ÁLVARO MEJÍA Y SU PASEO EN EL TOUR 1993
El caso de Álvaro Mejía es el de esos corredores que se podrían catalogar como un 'one hit wonder', ya que hizo un buen tour en el 93 y nunca más se volvió a saber nada de él.
Estamos hablando del típico escalador pequeño, delgado y colombiano. Corría en el motorola, equipo de Andrew Hampsten y Lance Armstrong. Ese año había sido el único que con mayor o menor dificultad había logrado aguantar con regularidad a Indurain y Rominger en la montaña, su tercer puesto en parís parecía claro pero le faltaba el escollo de la crono final.
Sabiéndose peor que sus rivales en la especialidad directamente salió a darse un paseo por Francia esperando que no le cayera un gran castigo en la linea de meta. Ni posición acoplada, ni ritmo constante; marcha suave, bebiendo agua con parsimonia y esfuerzo el justo. Llegó a meta con 3' 43" minutos perdidos en décima posición.
Al final le arrebató el puesto Zenon Jaskula, otro corredor 'one hit wonder'.
Debo decir que este corredor sufrió una lesión en 1995 que le tuvo dos años en el dique seco, tras su retirada en 1998 ha logrado sacarse una muy meritoria carrera de medicina

DENIS MENCHOV TOUR 2009
En esta ocasión se nos presenta Denis Menchov, un corredor que no hizo una contrarreloj mala o que sufriera varias caídas un día, sino un tour en el que contrarreloj que había golpe que se daba. Amén de otras escapadas que se veían frustradas debido a algún roce con el suelo.
A este tour llegaba el ruso como vencedor del giro, el equipo de putofútbol apostaba por él como agitador en la montaña pero la realidad fue bien distinta. Antes de que llegara la montaña ya había sufrido varios contratiempos; se vio afectado por una montonera en una de las primeras etapas, por si esto fuera poco en la contrarreloj por equipos cayó al suelo rezagando así a todo su bloque, ya que él era el jefe de filas. Pero la moral de Menchov parecía ser infinita y en la primera etapa de montaña decidió probar suerte desde lejos con la desgracia de resbalar con la pintura de un paso de peatones, el resultado fue otro besito a la calzada.
Al final Menchov terminó por relajarse y tomarse la ronda gala a guasa.

BOBBY JULICH DURANTE TODA SU VIDA
Por último he dejado a Bobby Julich, un corredor que si bien nunca ha tenido un mal día contra el crono sus percances siempre han estado ligados a la modalidad.
Ya en el tour del 99 contando entre los favoritos para la carrera tuvo que abandonar debido a una aparatosa caída en la crono. Ese no ha sido su único incidente en el tour, ya que en 2006 y sin estar entre los favoritos, de nuevo un fuerte golpe contra unos guijarros le fracturaron la muñeca. La etapa por supuesto, era una crono.
La verdad es que la vida de Julich siempre ha tenido un punto de fatalidad. Por ejemplo en el 96 fue tratado del corazón por bombear mucho más rápido de lo normal. Diez años después en el giro de Italia perdió bastante tiempo durante toda la carrera debido a su alergia al polen que no dejó de lastrarle.
Curioso tipo el Julich ya que a pesar de haber sido siempre un especialista contra el crono sus mayores batacazos se los ha dado ahí.